Hallan grietas en tubería de combustible en planta nuclear de Carolina del Sur
JENKINSVILLE, Carolina del Sur, EE.UU. (AP) — Las autoridades de Estados Unidos emitieron una advertencia sobre violaciones de las medidas de seguridad en una planta nuclear en Carolina del Sur, donde nuevamente se hallaron grietas en un ducto de combustible.
Se han hallado grietas media docenas de veces en los últimos 20 años en las tuberías que llevan combustible a los generadores de emergencia que proporcionan agua refrigerante en caso de que un reactor falle en la planta nuclear V.C. Summer, cerca de Columbia, según la Comisión Reguladora Nuclear de Estados Unidos.
La agencia emitió lo que llama una advertencia preliminar “amarilla” a la empresa propietaria de la planta, Dominion Energy, la semana pasada.
Ese es el segundo mayor nivel de advertencia y Estados Unidos ha emitido ese tipo de avisos sólo siete veces desde 2009, dijo el experto nuclear David Lochbaum al diario The State tras revisar los registros de reguladores federales.
El fallo de la comisión no es definitivo y Dominion tendrá oportunidad de explicar lo sucedido, afirmó en un email al diario un portavoz de la empresa, Darryl Huger.
Dominion ya ha empezado a implementar un plan para mejorar el sistema de emergencia, según Huger.
La primera grieta apareció en una tubería de diésel en 2003 y desde entonces se han detectado grietas en otros ductos.
En una prueba de 24 horas hecha al sistema en noviembre, una pequeña filtración de diésel aumentó, según registros de la comisión.
Dominion, con sede en Virginia, no ha sido la única propietaria de la planta. SCANA construyó y empezó a operar la planta en 1984. La compañía de Carolina del Sur tenía planes de construir otros dos reactores, pero los costos excesivos la obligaron a abandonar el proyecto en 2017 y vendérselo a Dominion.
Dominion recientemente solicitó renovar la licencia para la planta nuclear por otros 40 años.
Tom Clements, un activista a favor de mayores medidas de seguridad en plantas nucleares, dijo al diario que los problemas con las tuberías deberían ser una alarma para los reguladores.
“Este incidente sirve como voz de alarma para analizar totalmente todos estos sistemas antes de decidir sobre una renovación de la licencia”, dijo’ Clements en un email.