Al menos 72 muertos por aludes y aguaceros en un estado indio del Himalaya
NUEVA DELHI (AP) — Al menos 72 personas han muerto esta semana en la región del Himalaya indio debido a las constantes lluvias, según dijo el jueves un miembro del gobierno. Un intenso monzón provocó aludes de tierra e inundaciones que anegaron carreteras, arrastraron edificios e hicieron que la gente tuviera que ponerse a salvo.
Rescatistas en Himachal Pradesh, un estado montañoso, han trabajado en difíciles condiciones para salvar a personas atrapadas bajo el lodo y los escombros arrastrados por la lluvia durante el fin de semana. El departamento meteorológico indio puso el estado en alerta y esperaba que los aguaceros continuaran durante los próximos días.
Vikram Singh, operador del centro de operaciones de emergencia del estado, informó el jueves de 72 muertes en los cinco días previos y dijo que las labores de rescate seguían en marcha.
Cientos de carreteras seguían bloqueadas y las escuelas en la capital del estado, Shimla, habían recibido orden de cerrar mientras la Fuerza Aérea y equipos de manejo de emergencias ayudaban a personas de zonas bajas y vulnerables. Unas 2.000 persona fueron rescatadas con helicópteros y lanchas motoras y estaban a salvo en campos para desplazados, indicó el ministro jefe del estado, Sukhvinder Singh Sukhu.
Imágenes en medios sociales mostraban árboles que se desplomaban mientras varias viviendas construidas sobre colinas se derrumbaban una detrás de otra. Se oía gente llorando mientras exclamaban “salgan de ahí” y “vayan atrás”.
En Shimla, un templo hindú se derrumbó el lunes en medio de aludes de tierra que provocaron varios muertos, y las autoridades temían que aún hubiera gente sepultada bajo los escombros. El templo estaba lleno de fieles, lo que aumentaba el temor a que la cifra de muertos pudiera subir conforme avanzaban las labores de rescate.
Lluvias torrenciales centradas en puntos concretos arrastraron viviendas el domingo por la noche, inundaron carreteras y dejaron a gente incomunicada.
Esas lluvias torrenciales focalizadas dejan más de 10 centímetros (3,9 pulgadas) de agua en un espacio de 10 kilómetros cuadrados (3,8 millas cuadradas) en una hora. Son un fenómeno habitual en las regiones del Himalaya, donde pueden causar graves inundaciones y aludes de tierra que afectan a miles de personas.
Shuku, el ministro jefe, dijo a la agencia de noticias Press Trust of India que tomará un año reconstruir la infraestructura destruida por las lluvias de este monzón, y estimó las pérdidas en unos 100.000 millones de rupias (1.200 millones de dólares). “Es un gran desafío, un desafío como una montaña”, dijo.
Unas lluvias récord del monzón provocaron el mes pasado más de 100 muertos en dos semanas en zonas del norte de India, como Himachal Pradesh, que fue el más afectado.
Los desastres provocados por aludes e inundaciones son habituales en la zona durante la temporada de monzones entre junio y septiembre. Los científicos dicen que se están volviendo más frecuentes conforme el calentamiento global contribuye al deshielo de los glaciares en la región.
Sin embargo, expertos locales dijeron que el desastre actual probablemente se debía a un urbanismo no regulado en una región vulnerable. “Es mala planificación y gobernanza lo que ha provocado muchos de estos daños”, dijo Anand Sharma, meteorólogo retirado del Departamento Meteorológico de India.
Sharma procede de la región del Himalaya y ha estudiado de cerca los patrones meteorológicos en la región durante unas tres décadas. Las precipitaciones intensas y en ocasiones extremas en las faldas del Himalaya son previsibles durante la temporada del monzón, señaló.
“Todos los edificios derruidos son los que se construyeron hace poco, edificios construidos hace 100 años han tenido pocos o ningún daño”, señaló. El creciente turismo en la región es otro factor.
“Construyen donde quieren y cuando hay aguaceros, ocurren estos desastres de forma inevitable”, dijo Sharma.
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Arasu informó desde Bangalore, India.
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