Ecuador: candidata Luisa González se sentará a hablar con todos, con expresidente Correa como asesor
QUITO (AP) — La candidata a presidenta que lidera las preferencias electorales en Ecuador Luisa González está dispuesta a llamar a una gran concertación nacional con todos los partidos y cuenta con tener como asesor al expresidente Rafael Correa, que no puede volver al país por una condena de cárcel por corrupción.
En declaraciones a The Associated Press en la última semana de campaña, dijo que Ecuador "necesita unidad, un acuerdo mínimo, con todos lo sectores, un acuerdo para llevar el país al desarrollo”. Señaló que los principales desafíos son la inseguridad imperante en todo el país, el hambre, el desempleo y la salud.
Aunque descartó acercamientos con los otros siete postulantes a la presidencia, a quienes cuestiona por solo aparecer para las elecciones, afirmó que las necesidades urgentes de los ecuatorianos no reconocen banderas políticas. No saben si son de izquierda o de derecha y “tampoco les importa, aquí lo que importa es que su derecho a la vida, a la salud, a la educación sean garantizados”, señaló.
Acerca de la posibilidad de que desarrolle un gobierno a la sombra de Correa (2007-2017), quien está sentenciado a ocho años de cárcel por delitos de corrupción en Ecuador pero no cumple condena porque tiene su residencia en Bélgica, reconoció que espera contar con la figura del exmandatario.
“Pertenezco a un proyecto político y he dicho que Correa va a ser mi asesor", pero aclaró: “Quien va a dar la cara y tomará las decisiones es Luisa González y la decisión final será mía”. González se presenta a las elecciones bajo las siglas de Revolución Ciudadana, movimiento de Correa y con una fuerte campaña pública a favor del expresidente aludiendo a que es tiempo de ”recuperar" la patria.
El discurso político de la antes asambleísta también está alineado para rememorar y evocar obras y proyectos de la gestión pasada.
Correa gobernó Ecuador durante diez años con mano férrea y una actitud desafiante ante sus opositores políticos, periodistas, sindicalistas, indígenas empresarios y otros sectores, a los cuales solía descalificar en largas alocuciones todos los sábados. Tuvo especial atención con la prensa crítica: varios medios enfrentaron millonarias demandas judiciales y multas impuestas por un organismo del gobierno creado para vigilar a la prensa.
Para llevar adelante sus planes, González aseguró que está determinada a usar 2.500 millones de dólares de la reserva internacional del Banco Central de Ecuador, pese a que ésta está conformada también por los depósitos de la banca, del sistema financiero nacional y organismos del Estado, entre otros, de los más de 220 municipios (ciudades) del país.
Consultada acerca del asesinato a bala del candidato Fernando Villavicencio, ocurrido el miércoles en el norte capitalino, respondió que “cuando matan una persona, todos estamos en riesgo y más aún a un candidato presidencial”. Destacó que cuando se enteró del crimen, suspendió la campaña: "No nos pareció correcto seguir, cuando ya habían asesinado a un compañero ... candidato”.
Tras ello, aumentó y mejoró el operativo de seguridad personal y sus colaboradores le han reiterado la necesidad de que porte un chaleco antibalas. Se ha negado aduciendo que es “una mujer cristiana, tengo fe en Dios, él es quien nos cuida” y confesó que tiene un gran tatuaje de una rosa en su espalda, cuyo tallo es el salmo 41 que, en esencia, señala que Dios la sostiene de la mano.
Cuando tenga que lidiar con la inseguridad y violencia, en caso de llegar a la presidencia, apelará en cambio a la "mano dura”. Adelantó que hay que depurar la fuerza pública, pero también invertir en inteligencia y tecnología, redoblar el control en las fronteras, invertir en equipamiento para la fuerza pública, entre otras acciones urgentes. Son consignas en las que coinciden los ocho aspirantes a presidir un país en descomposición social por la acción de la delincuencia.
Acerca de las cárceles, González cuestionó que el gobierno de Guillermo Lasso no las tenga bajo control y afirmó que los presos y el crimen organizado han convertido el sistema penintenciario en su centro productivo y recreativo. Las cárceles son el centro de operaciones para sus actividades ilícitas, recalcó, pero dijo que ella está dispuesta a revertir tal situación.
La candidata de la Revolución Ciudadana marcha al frente de las preferencias electorales, de acuerdo con encuestas en las que la indecisión aún es alta, seguida por el ex vicepresidente Otto Sonnenholzner y el candidato indígena, Yaku Pérez.
El próximo domingo los ecuatorianos irán a las urnas para elegir al sucesor del mandatario Guillermo Lasso, quien disolvió la Asamblea a mediados de mayo y con ello acortó su propio período en medio de una pugna de poderes y una arremetida de los legisladores que buscaban destuitir al presidente en un juicio político.
El 20 de agosto también se debe elegir a 137 asambleístas. Las nuevas autoridades solo completarán lo que queda de período de gobierno, que termina en mayo del 2025.