Simon & Schuster es vendida a la firma KKR por 1.620 millones de dólares
NUEVA YORK (AP) — La editorial Simón & Schuster fue vendida a la firma de capital privado KKR, meses después de que una jueza federal bloqueara su compra por parte de la editorial rival Penguin Random House ante temores de afectaciones a la competencia en la industria editorial. Un ejecutivo de KKR calificó el acuerdo como una oportunidad de trabajar con “una de las editoriales más efectivas”.
El gigante de capital privado comprará Simon & Schuster por 1.620 millones de dólares en efectivo, dijo Paramount Global, la empresa matriz de la editorial histórica. Simón & Schuster operará como una entidad independiente, bajo el liderazgo del director general, Jonathan Karp.
“Estamos encantados”, dijo Karp el lunes. “Seguiremos siendo una empresa independiente y no solo seguiremos prosperando, sino que con la ayuda de KKR podemos llegar a ser aún más grandes”.
Paramount, que el lunes reportó una pérdida de 424 millones de dólares durante el trimestre previo al 30 de junio, utilizará las ganancias de la venta para pagar deuda. El acuerdo está sujeto a la aprobación del gobierno, pero es poco probable que enfrente las objeciones planteadas con la oferta de Penguin Random House.
Simón & Schuster, cuyos autores incluyen a Stephen King, Colleen Hoover y Bob Woodward, es una de las llamadas “cinco grandes” de las editoriales de Nueva York, junto con Penguin Random House, HarperCollins Publishers, Hachette Book Group y Macmillan. HarperCollins, propiedad de News Corp de Rupert Murdoch, había expresado interés por comprar Simon & Schuster.
Simón & Schuster ha tenido ventas sólidas en los últimos dos años, incluso cuando el mercado del libro se ha enfriado. La editorial tiene previstos algunos de los lanzamientos de final de año más esperados, incluyendo las memorias de Britney Spears “The Woman In Me” y la biografía de Elon Musk escrita por Walter Isaacson.
Richard Sarnoff, presidente de medios de KKR, elogió a Simon & Schuster como eficaz y bien dirigida y dijo que mantendría la independencia editorial.
“No les vamos a decir qué comprar, qué publicar o qué no publicar”, dijo Sarnoff, quien fue ejecutivo de la empresa matriz de Penguin Random House, el conglomerado alemán Bertelsmann. “Hay un legado de 99 años de independencia editorial que vamos a proteger”.
Sarnoff dijo que no se planean despidos y que, en cambio, KKR esperaba invertir y expandir Simon & Schuster, citando las ventas internacionales como un área de posible crecimiento. Al igual que con otras empresas propiedad de KKR, el conglomerado planea dar acciones los empleados de Simon & Schuster, un arreglo que podría dar a la editorial una ventaja competitiva. En una industria donde los salarios iniciales oscilan entre los 45.000 y 50.000 dólares, lo que puede resultar poco atractivo para los jóvenes que intentan vivir en el área de la ciudad de Nueva York, una participación accionaria podría valer la mitad o más del salario anual de un trabajador, según Sarnoff.
“La ventaja es grande”, dijo Sarnoff, quien agregó que no sabía cuánto tiempo ejecutaría KKR a Simon & Schuster antes de venderla, aunque mencionó de cinco a siete años como un rango típico. “No tenemos un cronograma establecido”, dijo.
La participación accionaria de los empleados es rara en el sector editorial, pero no sin precedentes. W. W. Norton & Company, fundada en 1923, ha sido propiedad exclusiva de los empleados por décadas.
A finales de 2020, Paramount había anunciado la venta de Simon & Schuster a Penguin Random House por 2.200 millones de dólares, un trato que habría convertido a la nueva compañía en la más grande editorial de Estados Unidos, pero el Departamento de Justicia, que bajo la administración de Biden ha adoptado una postura más estricta para la consolidación de empresas y el combate a posibles monopolios, en comparación con otras presidencias recientes, exigió bloquear la venta en 2021.
Después de un juicio de tres semanas a mediados de 2022, con King entre los que se oponían a la fusión, la jueza federal de distrito Florence Y. Pan falló a favor del gobierno y dijo que el Departamento de Justicia había presentado “un caso convincente que predice un daño sustancial a la competencia”.
Paramount se negó a apelar la decisión y, en cambio, renovó sus esfuerzos para vender Simon & Schuster, que el próximo año cumple su centenario. La editorial, fundada en 1924 por Richard Simon y Max Schuster, ha cambiado de propietario varias veces desde que Gulf+Western la compró en 1975. Paramount había intentado vender la editorial durante años, argumentando que no encajaba en el énfasis de la empresa en el entretenimiento por video.