Conservadores británicos anticipan derrotas en tres elecciones parciales
LONDRES (AP) — El gobernante Partido Conservador anticipaba fuertes derrotas el jueves en elecciones en tres distritos de Inglaterra debido a una crisis por el costo de la vida y una serie de escándalos políticos que los han desmoralizado.
Los votantes de los tres distritos —una pequeña población del norte, el suroeste rural y un suburbio de Londres— darán su veredicto sobre el partido que los gobierna desde 2010, un año antes de las elecciones generales.
Tres encuestas de opinión dan al Partido Laborista, de centroizquierda, al menos 15 puntos de ventaja sobre los conservadores en todo el país.
El primer ministro Rishi Sunak dijo a sus correligionarios en el Parlamento que habría una “batalla dura”, pero que aun así podrían ganar las próximas elecciones generales.
“Les prometo que podemos lograrlo, pero solo podremos lograrlo juntos, como un equipo”, dijo al díscolo bloque conservador el miércoles.
Las elecciones parciales son parte de la onda de choque del turbulento período de Boris Johnson, quien dejó su banca en el Parlamento hace un mes, casi un año después de renunciar como primer ministro, cuando un organismo supervisor reveló que había mentido al legislativo acerca de las fiestas ilegales en su oficina durante la pandemia de coronavirus.
Un aliado siguió el ejemplo de Johnson y otro legislador renunció en medio de acusaciones de sexo y drogas, lo que dio lugar a las tres elecciones.
El laborismo espera recuperar la banca de Johnson en los suburbios londinenses de Uxbridge y South Ruislip, así como en el distrito mixto urbano-rural de Selby y Ainsty, que dejó vacante Nigel Adams, un aliado de Johnson. Se prevé que los centristas Demócratas Liberales ganarán en el distrito Somerton y Frome, en el suroeste, cuyo representante conservador David Warburton renunció ante denuncias de consumo de cocaína y abusos sexuales.
Una triple derrota conservadora alimentaría las quejas de que Sunak es incapaz de revertir la mala situación del partido después del caos provocado por los escándalos de Johnson.