Autoridades israelíes desahucian a una familia palestina de Jerusalén tras décadas de batalla legal
JERUSALÉN (AP) — Las autoridades israelíes desahuciaron el martes a una familia palestina de su disputado apartamento en la zona antigua de Jerusalén, según indicó la familia, tras una batalla legal de décadas que simbolizó las reclamaciones enfrentadas sobre la ciudad.
Activistas describieron la expulsión de la familia Ghaith-Sub Laban como parte de una tendencia más amplia en la que colonos israelíes respaldados por el gobierno se adentran en vecindarios palestinos y consolidan el control israelí confiscando propiedades en Jerusalén Oriental. Israel lo consideraba como una mera disputa de bienes raíces, en la que los colonos acusaban a la familia de ocupar de forma ilegal un apartamento que antes fue propiedad de judíos.
La Corte Suprema de Israel rechazó este año la apelación final de la familia y puso fin a 45 años de batalla legal sobre su derecho a vivir en el apartamento.
La familia dice que se instaló allí a principios de la década de 1950 y lo arrendó a un “custodio general” de propiedades abandonadas, primero bajo autoridad jordana y después israelí tras la Guerra de los Seis Días de 1967.
El caso se prolongó décadas, mientras el custodio israelí y el fondo Kollel Galicia cuestionaban la condición “protegida” de la familia. Entre sus afirmaciones estaban que la familia no había utilizado la propiedad durante periodos largos de tiempo.
Agentes de policía acudieron el martes de madrugada a la casa de Nora Ghaith-Sub Laban en la zona antigua de Jerusalén, forzaron la puerta y sacaron a la familia, dijo su hijo, Ahmad Sub-Laban. Se prohibió a la familia regresar al inmueble, añadió.
“Cuando volvimos a la puerta de la casa enfrentamos la nueva realidad de que nuestra entrada principal se había cerrado y no tenemos derecho a utilizarla”, dijo. “Se llevaron la llave y cambiaron la cerradura”.
Free Jerusalem, un grupo activista que ha intentado apoyar a la familia, dijo que la policía había detenido a 12 personas que se manifestaron contra el desahucio el martes por la mañana.
La zona antigua de Jerusalén, donde hay lugares sagrados para tres religiones monoteístas, fue capturada por Israel junto con el resto de la ciudad en la guerra de 1967 y más tarde anexionada, una decisión no reconocida por la mayoría de la comunidad internacional.
Israel considera toda la ciudad como su capital, mientras que los palestinos reclaman Jerusalén Oriental como capital de un futuro estado independiente.
Más de 220.000 judíos viven ahora en Jerusalén Oriental, la mayoría en asentamientos nuevos que Israel considera vecindarios de la capital. La mayoría de los 350.000 palestinos que viven allí están hacinados en barrios superpoblados donde hay poco espacio para construir.
Las autoridades no permitieron que la familia regresara a la casa para recuperar sus muebles o medicinas para Noura o Rafat, el hijo de Noura, dijo Rafat. Apenas pudieron llevarse un objeto mientras las autoridades les obligaban a salir: una planta que lleva 17 años en la familia.
“Decidimos llevárnosla para recordar que vivimos aquí, nuestros hijos crecieron aquí, y estamos deseando regresar a la casa”, dijo Ahmad.
Ahmad y sus hermanos fueron desahuciados de la casa en 2016. Por ahora, Noura y su esposo, Mustafa, se quedarían con sus hijos en Shuafat, una localidad a las afueras de Jerusalén, hasta que pudieran encontrar un lugar permanente donde vivir, dijo Rafat.
En la mitad oriental de la ciudad, especialmente en la zona antigua y sus alrededores, organizaciones de colonos y fondos judíos libran batallas judiciales contra familias palestinas para hacer sitio a colonos.
Una ley israelí aprobada tras la anexión de Jerusalén Oriental permite a los judíos reclamar propiedades que fueron judías antes de la formación del estado israelí en 1948. Jordania controló la zona entre 1948 y la guerra de 1967.
No hay un derecho equivalente en Israel para que los cientos de miles de palestinos que huyeron o fueron obligados a abandonar sus hogares en torno a la fundación de Israel en 1948 recuperen propiedades perdidas.
Durante el mandato británico sobre la Palestina histórica, antes de la guerra en torno a la creación de Israel, el apartamento de Ghaith-Sub Laban fue propiedad de un fondo de Kollel Galicia, un grupo que recaudaba fondos en Europa del Este para familias judías en Jerusalén.
Una disputa similar que podría suponer desahucios de familias palestinas en el cercano vecindario de Sheikh Jarrah provocó tensiones que derivaron en una guerra en 2021 entre Israel y el grupo armado Hamas en Gaza, en la que murieron más de 250 personas.
Casi mil palestinos, incluidos 424 niños, están en riesgo de desahucio en Jerusalén Oriental, según la oficina humanitaria de Naciones Unidas.