Teniente de alcalde de Helsinki es descubierto pintando un grafiti
HELSINKI (AP) — El teniente de alcalde de la capital de Finlandia se enfrenta a una posible acción legal, además de que podrían pedir que renuncie y pague una indemnización por daños y perjuicios, después de que el pasado fin de semana lo sorprendieran con las manos en la masa pintando con aerosol un grafiti en un túnel ferroviario.
La Agencia de Infraestructura de Transporte de Finlandia dijo el miércoles a la emisora pública YLE que limpiar los grafitis pintados ilegalmente por Paavo Arhinmäki, uno de los cuatro tenientes de alcalde de Helsinki, le costó a la ciudad alrededor de 3.500 euros (3.830 dólares).
Arhinmäki, de 46 años, y un amigo fueron descubiertos por guardias en un túnel ferroviario en el este de Helsinki el viernes justo después de haber terminado un grafiti que, según expertos finlandeses en arte callejero, parecía en parte inspirado en obras vistas en la ciudad de Nueva York en la década de 1970.
El periódico más grande de Finlandia, Helsingin Sanomat, publicó una foto del grafiti en un tuit.
En una publicación de Facebook el domingo, Arhinmäki, conocido como un firme partidario del arte callejero y creador de grafitis en su juventud, se disculpó por su “tontería estúpida”. Es exlegislador y fue presidente del partido Vasemmistoliitto (Alianza de Izquierda), y se desempeñó como ministro de cultura y deportes en 2011-2014.
La policía investiga el acto como vandalismo e interferencia con el tráfico ferroviario, que tuvo que ser detenido temporalmente a causa del incidente. El túnel ferroviario es utilizado por trenes de carga que van y vienen de un puerto de Helsinki.
No estaba claro de momento si Arhinmäki enfrentaría cargos legales.
“Cometí un delito y asumo toda la responsabilidad por ello”, dijo Arhinmäki a YLE el lunes, pero se negó a renunciar a su cargo y al Ayuntamiento de Helsinki, donde su partido Vasemmistoliitto lo respalda.
El caso ha causado revuelo y debate entre los ciudadanos de Helsinki en las redes sociales, con una mayoría que condena, y otros que apoyan ferozmente, las acciones del teniente de alcalde que está a cargo de los asuntos de cultura y ocio en Helsinki, una ciudad de 650.000 habitantes.
La capital finlandesa gasta aproximadamente 650.000 euros (710.000 dólares) al año para eliminar grafitis ilegales en toda la ciudad, y actualmente busca establecer sitios adicionales sancionados para el arte callejero.