Francia: Macron dice que es “inexcusable” muerte de joven a manos de la policía
NANTERRE, Francia (AP) — La policía se enfrentó con manifestantes la noche del miércoles, horas después de que el presidente francés, Emmanuel Macron, calificara de “inexcusable” la muerte de un repartidor de 17 años que fue baleado por la policía y pidiera calma mientras la justicia sigue su curso.
Fue la segunda noche de violencia en el suburbio parisino de Nanterre, incluso aunque el gobierno aumentó la presencia policial en París y otras grandes ciudades el miércoles después de que la muerte del joven desencadenara una noche de violencia dispersa.
En videos tomados en el suburbio se podían ver incendios en algunas calles y manifestantes que lanzaban pirotecnia a la policía.
La muerte de Nael —ni las autoridades ni la familia han revelado su apellido— durante un control de tráfico en Nanterre generó preocupación nacional y mensajes de consternación y condolencias. El futbolista francés Kylian Mbappé tuiteó: “Me duele mi Francia”.
La madre de Nael convocó a una marcha silenciosa para el jueves en honor de su hijo en la explanada donde falleció, mientras que activistas renovaron su llamado a acabar con el abuso policial que consideran sistémico. Funcionarios del gobierno condenaron la muerte del joven y buscaron distanciarse de las acciones del policía.
“Nada justifica la muerte de una persona joven”, expresó Macron a los reporteros en Marsella, agregando que lo sucedido es “inexplicable e inexcusable”.
Videos del incidente compartidos en internet muestran a dos agentes de policía asomados a la ventanilla del conductor de un coche amarillo antes de que el vehículo se aleje mientras uno de los agentes dispara por la ventanilla. Después se ve al coche estrellarse contra un poste cercano.
La víctima, que conducía el coche, resultó herida de bala y murió en el lugar de los hechos, según informó la fiscalía en un comunicado. Un pasajero del coche fue detenido brevemente y dejado en libertad, y la policía busca a otro pasajero que huyó.
La indignación por el suceso generó disturbios en varios poblados alrededor de París. El ministro del Interior, Gerald Darmanin, dijo que 31 personas fueron detenidas, 24 policías resultaron heridos y 40 autos fueron incendiados durante los disturbios de la noche del martes.
El policía sospechoso de dispararle a Nael fue arrestado y enfrenta posibles cargos de homicidio involuntario, según la fiscalía de Nanterre.
Varias personas han muerto o han resultado heridas a manos de la policía francesa en los últimos años, lo que ha generado pedidos de una mayor rendición de cuentas.
Macron pidió calma y respeto para los seres queridos de Nael. Al ser cuestionado por los abusos policiales, dijo que había que dejar que la justicia siguiera su curso.