Con “Across the Spider-Verse” Phil Lord y Chris Miller “dejan las puertas abiertas”
NUEVA YORK (AP) — Aparte del horizonte invertido, el único indicio de que algo está raro en una de las imágenes más llamativas de “Spider-Man: Across the Spider-Verse” (“Spider-Man: A través del Spider-Verso”) es un peinado de cola de caballo que sobresale en el aire.
Gwen Stacy (con la voz de Hailee Steinfeld en el elenco en inglés) y Miles Morales (Shameik Moore) se reunen en la secuela de “Into the Spider-Verse”. Después de columpiarse vertiginosamente a través de los rascacielos de Nueva York, se sientan en la parte inferior de una cornisa de una torre con una hermosa vista de la ciudad al revés, brillando en la distancia.
“Todo está mal, pero se siente bien”, dice Phil Lord, quien escribió y produjo “Across the Spider-Verse” con Christopher Miller.
En las películas de Lord y Miller, un dúo de cineastas que colabora desde que se conocieron en la universidad en Dartmouth, abajo es frecuentemente arriba y arriba es a menudo abajo. Han convertido ideas aparentemente terribles (una película de Lego, una película de “21 Jump Street”) en obras originales de comedia divertida e innovadora. Uno de sus logros más importantes, “Into the Spider-Verse” (“Spider-Man: Un nuevo universo”), galardonada con el Oscar, rompió con las convenciones de las películas de superhéroes. Spider-Man, por primera vez, era un niño birracial de Brooklyn. También era, gracias a una mezcla de multiversos, casi cualquier persona o cualquier cosa posible.
“Con esa máscara que cubre todo el cuerpo y la cara, puedes imaginarte con ese traje”, dice Miller. “El objetivo de esta trilogía era hacer que todos sintieran que podrías ser tú, y mostrar tantos tipos diferentes de personas y animales como Spider-Man como fuera posible”.
Tomó casi cinco años, un equipo de producción de mil integrantes y un grupo de Gente-Spider, pero el segundo capítulo de la serie “Spider-Verse” de Miller y Lord llegó. Quizá sea su obra maestra. En “Across the Spider-Verse”, un torbellino de color y sonido animado eléctricamente que deleita los ojos, Lord y Miller se propusieron no sólo superar la vara alta de su original de 2018, sino también dar un vuelco a la animación de grandes estudios y a las expectativas de hacer una secuela con más de lo mismo.
“Fue una oportunidad para mostrar las posibilidades ilimitadas de la animación en una película de estudio”, dice Miller. “Durante demasiado tiempo, los estudios exigían que todas estas películas tuvieran el mismo aspecto. Y queríamos abrir las puertas de par en par”.
“Across the Spider-Verse” ciertamente superó las expectativas en su primer fin de semana. Debutó con 120,5 millones de dólares, muy por encima de las estimaciones y más del triple de lo que recaudó “Into the Spider-Verse”. Lo que alguna vez era una rareza menor en el enorme mundo de las películas de superhéroes se ha convertido no sólo en un éxito, sino en una sensación genuina de la cultura pop y quizá un nuevo punto culminante en las películas basadas en comics.
“Cuando tienes la confianza del público, como espero que tengamos desde la primera película, quieres usarla como un trampolín para correr más riesgos”, dice Lord. “No podríamos justificar hacer esto con ninguna otra historia o en cualquier otro punto de nuestras carreras. Pensamos: Abaniquemos el bate más grande que podamos”.
“Across the Spider-Verse”, dirigida por Joaquim Dos Santos, Kemp Powers y Justin K. Thompson, continúa la historia de Miles, ahora un veterano luchador contra el crimen, pero también un adolescente con una relación cada vez más tensa con sus padres. Ellos siguen sin saber de su identidad secreta.
Mucho de lo que hay en “Across the Spider-Verse” no es sencillo, Lord y Miller escribieron el filme con David Callaham en el que hay innumerables Tierras paralelas, cada una con su propia Persona-Spider. Una es Gwen (Hailee Steinfeld), el interés romántico tradicional de Spider-Man, quien ahora es una fuerza poderosa por sí misma. Los mundos chocan, muchas veces.
También hay un colectivo Spider que mantiene estos universos en equilibrio al asegurarse de que ocurran ciertos momentos canónicos para cada héroe. Puede haber una amplia libertad en cuanto a quién puede ser Spider-Man, pero se debe obedecer una base de fórmula.
Esta batalla con el Canon del multiverso es, en muchos sentidos, la lucha de Lord y Miller también. Han pasado sus carreras deconstruyendo convenciones e invirtiendo tropos. A veces han empujado hasta los límites de Hollywood. A la mitad de la producción de “Solo”, la película de “Star Wars” sobre Han Solo, fueron reemplazados después de un choque sobre el tono del filme.
“Across the Spider-Verse”, una segunda parte que termina en un suspenso abrupto, se sumerge directamente en la pregunta: Entonces, ¿qué es el evangelio para Lord y Miller? ¿Es algo?
“¿Quién busca convertirse en artista para ser una columna que sostiene el templo?”, dice Lord riendo. “Eso no es divertido.”
El alboroto de “Solo” podría haber sido su momento como sacado del filme “Network” (“Poder que mata”), que tiene diálogos como “usted se ha entrometido con las fuerzas primarias de la naturaleza, Sr. Beale”. En cambio, Lord y Miller, en todo caso, han duplicado su devoción por romper con las jugadas convencionales de Hollywood.
“Tenemos una aversión natural a los peligros de la nostalgia. Puede tener un efecto calcificante en las personas”, dice Miller. “Hay mucha ira y odio por querer preservar las cosas como siempre han sido. Así no es como funciona la sociedad. Necesitamos seguir evolucionando y haciendo cosas nuevas y creciendo. No podemos simplemente preservar perfectamente el pasado”.
“Las películas que amas fueron todas atrevidas en su época”, agrega Lord. “La idea no es copiarlos. Es ser tan atrevidos como ‘Blancanieves’ o ‘Toy Story’ o ‘Tiburón’”.
Sus películas tipo collage, como el viaje por carretera de la familia de Michael Rianda “The Mitchells vs. The Machines” (“Los Mitchell contra las máquinas”), a menudo contemplan de alguna manera a la humanidad en mundos cada vez más digitales. Lord y Miller también estuvieron detrás del meme convertido en película “Cocaine Bear” (“Oso intoxicado”) a principios de este año.
Con un ritmo de hip hop moderno y repleta de choques de color en constante cambio que canalizan el arte 2D de los cómics, “Across the Spider-Verse” convoca multiversos con la facilidad con la que una persona teclea. Pero lo hace de una forma mucho más juguetona, desordenada y claramente sin seguir al algoritmo. Buscar la originalidad, dicen, es “mantener a los robots adivinando”.
“La IA (inteligencia artificial) no va a generar algo nuevo y original”, dice Miller, quien, junto con Lord, es miembro del Sindicato de Guionistas en huelga para quienes la inteligencia artificial es un tema principal. “Simplemente va a hacer una imitación de las cosas que vinieron antes. Es nuestro trabajo como humanos seguir haciendo cosas nuevas”.
Pero a pesar de lo vertiginoso que “Across the Spider-Verse” pueda ser visualmente, las imágenes están, en última instancia, al servicio de la vida interior de sus personajes principales. Para Moore, de 28 años, el atractivo de Miles no es que sea excepcional. Es que es reconociblemente ordinario.
“Hay jóvenes negros que son como Miles. Chicos normales, geniales, un poco nerds, raros y adorables. Lo mismo en el lado hispano”, dice Moore. “La gente quiere conocerlo. Mis diálogos en la Comic-Con son una locura”.
Moore nunca recibió un guion para ninguna de las películas, solo una idea de los puntos principales de la trama. Tres veces al mes, durante cuatro años, entraba en una cabina de grabación para sesiones de seis horas con Lord, Miller y los directores.
“Jugaban con eso durante horas. Hacíamos otra sesión en la que se fijaban en lo que más les gustaba y luego volvían a jugar con eso. Es realmente como si se estuvieran divirtiendo, más que nada”, dice Moore. “Todo el proyecto está siendo tratado como un proyecto de pasión. No se siente como si alguien los estuviera vigilando”.
Al mismo tiempo, “Across the Spider-Verse” lidia no solo con las responsabilidades de Spider-Man (Miles), sino también con las de sus ansiosos y dubitativos padres (Brian Tyree Henry y Luna Lauren Vélez) y el desaprobador padre de Gwen (Shea Whigham). Es una historia sobre el paso a la edad adulta, pero como dice Miller, “los padres también tienen que llegar a la mayoría de edad”.
“¿Y qué hace que alguien sea legítimo?”, dice Lord. “¿Buscas eso fuera de ti mismo? ¿O puedes simplemente buscar tu propia aprobación? Miles es como todos nosotros esperando una validación externa. Pero eso nunca puede satisfacerte realmente. Tienes que asumirlo tú mismo. Aunque la película termina en suspenso, creo que eso es lo que logra. Es una película de acción épica donde la historia es realmente interna”.
Algunas de las mismas preguntas existen para Lord y Miller, ambos de 47 años y cineastas cada vez más prominentes con una larga cartera de proyectos en desarrollo. A finales de este verano tienen la comedia de perros con clasificación para adultos “Strays” en los cines. Incluso una película con actores reales para Miles está entre los posibles proyectos.
“Siempre te sientes como un extraño, incluso si trabajas dentro de estas grandes empresas”, dice Miller. “De lo contrario, te conviertes en el Imperio”.
“Beyond the Spider-Verse”, la tercera película de la trilogía, se estrenará el 29 de marzo de 2024. Concluirá la inminente batalla de Miles con el Spider-Man Canon. Se pondrá a prueba hasta qué punto Miles, y Lord y Miller, pueden estirar las telarañas de Marvel.
Teniendo en cuenta quién está detrás de estas películas, no vale la pena apostar porque el Canon saldrá victorioso.
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Jake Coyle está en Twitter como http://twitter.com/jakecoyleAP