Presidente iraní: Venezuela e Irán fortalecen relaciones ante EEUU como "enemigo común"
CARACAS (AP) — El presidente iraní, Ebrahim Raisi, destacó el lunes en su visita a Venezuela que los dos países tienen “un enemigo común”, en alusión a Estados Unidos, lo que motivó la suscripción de más una docena de acuerdos para fortalecer la cooperación con el gobierno de Nicolás Maduro en varias áreas.
El mandatario iraní, acompañado de Maduro en el palacio de gobierno de Caracas, indicó que el vínculo entre ambos países “no es normal, sino que es una relación estratégica”, insistiendo que sus naciones tienen “intereses comunes y tenemos enemigos comunes”.
Es la primera visita de Raisi a América Latina y se da en medio de tensiones con Washington. “Los dos países tenemos un enemigo común”, insistió el mandatario iraní, pero también cuestionó que “no quieren que los dos países, Irán y Venezuela, sean independientes”.
Luego de su visita a este país sudamericano, Raisi continuará su viaje por Cuba y Nicaragua, sus otros países aliados en América Latina.
Estados Unidos acusa a Teherán de proporcionar a Rusia materiales para construir una planta de fabricación de drones al este de Moscú, mientras el Kremlin busca asegurarse el suministro constante de armamento para su invasión a Ucrania.
Funcionarios de inteligencia de Estados Unidos creen que la planta en Rusia podría iniciar operaciones a principios del próximo año, pero Irán ha dicho que suministró drones a Rusia antes del comienzo de la guerra.
Si bien ha instado a la búsqueda de soluciones pacíficas, el gobierno de Maduro ha acusado a la Organización Tratado del Atlántico Norte (OTAN) de provocar la crisis en Ucrania y se refiere al conflicto bélico como una “operación militar especial”, como Moscú llama oficialmente la invasión de Ucrania.
Entre los 13 documentos suscritos el lunes destacan acuerdos en cooperación portuaria y marítima, petroquímica, tecnologías de telecomunicaciones y médicas, ciencias, cultura, minería y becas para estudiantes venezolanos, entre otras áreas. También se firmó un convenio en materia sanitaria para la importación de ganado vacuno en la República islámica.
Venezuela e Irán mantienen relaciones cercanas desde el gobierno del fallecido presidente Hugo Chávez (1999-2013) y Caracas ha suscrito con Teherán más de tres centenares de memorandos de entendimiento y acuerdos de cooperación desde entonces en materia comercial, industrial, financiera y petrolera, aunque apenas un puñado se han materializado.
"Luego de las agresiones imperiales, luego de más 900 sanciones criminales, aquí está Venezuela de pie tendiendo su mano a Irán“, exclamó Maduro.
“Estamos del lado correcto de la historia y juntos seremos invencibles”, agregó.
Ambos mandatarios se han reunido en seis ocasiones.
Maduro -que llegó al poder en 2013 tras el deceso de Chávez- ha impulsado relaciones comerciales con Irán, China, Rusia y Turquía para intentar sortear los efectos de las sanciones financieras que Estados Unidos le ha impuesto a su gobierno y revitalizar su economía.
Las sanciones estadounidenses buscan impedir que el gobierno socialista venezolano pueda realizar transacciones financieras y comerciales en el extranjero, acceder a activos internacionales de Venezuela y negociar con petróleo u oro. Washington, además, prohibió a los estadounidenses y sus socios internacionales hacer negocios con Caracas para presionar a Maduro a dejar el poder, argumentando que fue reelecto en 2018 en comicios fraudulentos.
Irán, particularmente desde 2020, ha ayudado a paliar parte de la escasez de combustible en Venezuela, que en el pasado fue uno de los mayores productores de petróleo y sus derivados en el mundo pero que desde hace más de un lustro experimenta una drástica caída en su producción.
Los críticos del gobierno atribuyen el colapso de la industria petrolera a una mala gestión y a la corrupción en la corporación estatal Petróleos de Venezuela SA (PDVSA) bajo los gobiernos de Chávez y Maduro, su heredero político.
La más reciente trama de corrupción se produjo en marzo al detectarse una serie de irregularidades en la comercialización internacional de PDVSA. Con relación a ese caso, se encuentran detenidos más de seis decenas funcionarios y empresarios.
Al menos 13 de los altos funcionarios detenidos eran cercanos colaboradores del otrora poderoso ministro de Petróleo, Tareck El Aiisami, quien renunció al cargo, argumentando que tomó esa decisión para “acompañar y respaldar totalmente” las investigaciones. Desde entonces, se desconoce el paradero del ministro.