Cerúndolo molesto con juez de silla por decisión clave ante Rune en Roland Garros
PARÍS (AP) — El argentino Francisco Cerúndolo se sintió devastado tras perder en la cuarta ronda del Abierto de Francia ante el danés Holger Rune en el desempate del quinto set el lunes. También estaba molesto con el juez de silla Kader Nouni por no percatarse de un doble pique de bola que terminó dándole un punto a Rune en la victoria por 7-6 (3), 3-6, 6-4, 1-6, 7-6 (10-7).
El momento de polémica ocurrió cuando estaban empatados a un set cada uno y con el saque 2-1 a favor de Rune, el sexto cabeza de serie, en la cancha Suzanne Lenglen. Cerúndolo sacó con el game empatado 40-40 y dio un derechazo que rozó bajo en la línea y rápidamente rebotó una segunda vez —lo que le hubiera significado que el punto sería para él.
Pero Rune siguió la jugada y le pegó a la bola que regresó sobre la red. En ese momento, Cerúndolo (23ero preclasificado) se disculpaba por la forma en la que su derechazo hizo que rebotara en la arcilla. Nouni no se percató inmediatamente del doble pique, pensó que la bola seguía en juego y castigó a Cerúndolo por hablar en medio de un game. Esto significó que Rune recibió el punto antes de ganar el siguiente con un quiebre de servicio.
“Fue clarísima. Fue alevoso. Estaba enojadísimo con el juez, debió haberla vista”, dijo Cerúndolo. “Es su culpa”.
En el tenis se utiliza las decisiones de línea electrónica en la mayoría de los torneos, pero no se usa la repetición en los dobles piques o si debería perder el punto si el jugador tocó la red.
Y cuando Cerúndolo le cargó la responsabilidad al juez, creyó que Rune podría haber cedido el punto por el doble pique.
“Claro, desearía que lo hubiera hecho, por que fue un gran momento”, admitió el argentino.
Rune, que avanzó para enfrentar a Casper Ruud (4) en los cuartos de final, dijo que vio la repetición tras el siguiente punto y “vi que era un bote doble. Pero el punto ya había pasado y la puntuación estaba puesta. Lo siento por él”.
Pero agregó: "Esto es tenis, así es el deporte. Algunos árbitros cometen errores, algunos para mí, algunos para él. Así es la vida”.