Ucrania derriba 35 drones en Kiev, ataques rusos matan a 3
KIEV, Ucrania (AP) — Las defensas antiaéreas ucranianas derribaron 35 drones de fabricación iraní sobre Kiev, en un nuevo ataque ruso durante la noche mientras otros ataques de las fuerzas del Kremlin en diferentes lugares de Ucrania dejaban tres muertos, según dijeron las autoridades el lunes. Entre tanto, Moscú reforzaba la seguridad antes de los festejos tradicionales en la Plaza Roja en memoria de la derrota de la Alemania nazi en la II Guerra Mundial.
Cinco personas resultaron heridas en la capital ucraniana por restos de los drones, indicó Serhii Popko, responsable de la administración militar de la ciudad. Las alarmas antiaéreas sunaron durante más de tres horas durante la noche.
Los restos de drones impactaron contra un edificio de apartamentos de dos plantas en el distrito occidental de Svyatoshynskyi, mientras que otros trozos de metralla cayeron contra un auto estacionado cerca y lo incendiaron, indicó en Telegram el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko.
Rusia, sujeta a sanciones económicas y limitaciones en sus cadenas de suministro debido a la invasión en Ucrania que inició en febrero de 2022, ha recurrido a menudo a los drones Shahed iraníes para reforzar su potencia de fuego.
Tres civiles murieron en ataques rusos contra 127 objetivos en el norte, sur y este de Ucrania, según el Ministerio ucraniano de Defensa.
Las fuerzas del Kremlin emplearon tanques, drones, morteros, aviones de combate, lanzacohetes múltiples y misiles tierra-aire para bombardear Ucrania, indicó el reporte.
Los bombarderos rusos de largo alcance lanzaron hasta ocho misiles de crucero contra la región sureña ucraniana de Odesa, según las autoridades.
Algunos de los misiles de crucero de la era soviética empleados en Odesa se autodestruyeron o cayeron al mar antes de alcanzar sus objetivos, indicó el vocero de la fuerza aérea ucraniana Yuri Ihnat.
Además, seis cohetes rusos golpearon la ciudad oriental ucraniana de Kramatorsk durante la noche, según dijo el lunes un funcionario regional.
Los misiles iban dirigidos contra la zona industrial de la ciudad y no causaron víctimas, indicó el gobernador regional de Donetsk, Petro Kyrylenko, en una publicación en Telegram.
Mientras tanto, las autoridades rusas se preparaban para las celebraciones el martes del Día de la Victoria, el feriado secular más importante de Rusia, en medio de fuertes medidas de seguridad. Muchas regiones cancelaron sus actos del 9 de mayo por temor a que pudieran ser blanco de ataques ucranianos.
Aunque normalmente el 9 de mayo también es feriado en Ucrania, este año no lo será debido a la guerra.
El presidente, Volodymyr Zelenskyy, dijo el lunes que había enviado una propuesta de ley al parlamento proponiendo que se celebre el Día del Recuerdo y la Victoria sobre el nazismo en la II Guerra Mundial el 8 de mayo y un Día de Europa el 9 de mayo, lo que distanciaría más a Kiev de Moscú.
Zelenskyy comparó los objetivos de Rusia en Ucrania con los de los nazis. “Por desgracia, el mal ha regresado”, dijo Zelenskyy en Telegram. “Aunque ahora es otro agresor, el objetivo es el mismo: la esclavitud o la destrucción”.
Entre tanto, las autoridades nombradas por Rusia empezaron a evacuar a la población de Tokmak, una población en el frente al sur de la región de Zaporiyia, hacia la costa del Mar Negro, según dijo el Estado Mayor ucraniano.
Los empleados de las autoridades locales nombradas por el Kremlin, así como niños y personal docente, estaban siendo trasladados a Berdyansk, una ciudad costera ocupada por Rusia a unos 100 kilómetros en dirección sureste.
El reporte se conocía apenas unos días después de que Yevhen Balitsky, gobernador nombrado por Rusia en la región parcialmente ocupada de Zaporiyia, ordenara el viernes la evacuación de civiles de 18 poblaciones de la zona, incluida Energodar, junto a la central nuclear de Zaporiyia.
Hace meses que se multiplican las especulaciones sobre el momento y el objetivo de la ofensiva ucraniana esperada para esta primavera, y algunos analistas dicen que Kiev podría tratar de atacar al sur, en Zaporiyia, en un intento de dividir a las fuerzas rusas y cortar la conexión terrestre de Moscú con la ocupada Crimea.
Por otro lado, el mando militar ruso prometió al Grupo Wagner, una compañía militar privada, munición y equipamiento adicional para su ofensiva en la ciudad oriental de Bájmut, según dijo el fundador de la firma, Yevgeniy Prigozhin, en un mensaje de voz publicado por su servicio de prensa.
Prigozhin había amenazado el viernes con retirar a los combatientes de Wagner de la asediada ciudad, donde son la principal fuerza de ataque ruso desde hace semanas. Acusó al mando militar ruso de no proporcionarle suficiente munición y causarle fuertes bajas.
La amenaza era un nuevo roce en la larga disputa de Prigozhin con los mandos regulares del ejército ruso por los méritos y tácticas en la guerra. En su mensaje del domingo, el millonario afirmó que los oficiales rusos se habían comprometido a proporcionar a los mercenarios “munición y equipamiento, tanto como sea necesario para continuar”, además de dar libertad al grupo para tomar decisiones operativas en Bájmut.