Segundo demócrata expulsado regresa a cámara de Tennessee
NASHVILLE, Tennessee, EE.UU. (AP) — El segundo de dos legisladores demócratas negros expulsados por la mayoría republicana de la cámara baja en Tennessee regresó a su banca el jueves, una semana después de que su expulsión por participar en una protesta a favor del control de armas los proyectó a la escena nacional.
El representante Justin Pearson, de Memphis, prestó juramento el jueves frente al capitolio estatal. En la víspera, la junta de comisionados del condado de Shelby aprobó unánimemente su reintegración.
“En verdad, feliz día de la resurrección”, manifestó Pearson el jueves por la mañana al firmar los documentos correspondientes.
Antes del regreso de Pearson, los legisladores en el recinto rindieron homenaje a los policías que respondieron a un tiroteo reciente en una escuela de Nashville. Ese hecho, en el que murieron tres niños y tres adultos, fue el que dio lugar a la protesta. El representante demócrata Bob Freeman elogió a los agentes por su valor, pero destacó que “la inacción no es una opción” para responder a la masacre.
Los republicanos expulsaron a Pearson y Justin Jones por su papel en la protesta dentro del recinto. El lunes, el Concejo Metropolitano de Nashville votó rápidamente por la reincorporación de Jones, quien regresó a su banca el mismo día.
Pearson, tras el voto de reintegración en el condado de Shelby, pronunció un discurso digno de un fogoso pastor evangélico a una multitud de partidarios jubilosos.
Las designaciones son interinas y ambos planean presentarse a una elección especial por sus bancas hacia finales de año.
El voto de la cámara fue para expulsar a Pearson y Jones, pero no a la representante Gloria Johnson, quien es blanca. La conducción republicana negó que la raza fuera un factor en su decisión, y alegó que Johnson no hizo lo mismo que Jones y Pearson en la protesta, como hablar con un megáfono.
La expulsión es una medida que la cámara ha aplicado unas pocas veces desde la Guerra Civil. La mayoría de las legislaturas estatales tienen la facultad de expulsar miembros, pero generalmente se usa como castigo a los acusados de faltas graves, no como arma contra la oposición política.
Con las expulsiones del jueves pasado, Tennessee se convirtió en un nuevo frente en la batalla por el futuro de la democracia estadounidense. En el lapso de pocos días, los dos expulsados recaudaron miles de dólares y el Partido Demócrata de Tennessee recibió una inyección de apoyo de todo el país.
Las tensiones políticas se agudizaron cuando Pearson, Johnson y Jones, en medio del recinto de la cámara, se sumaron a cientos de manifestantes que reclamaban medidas para el control de armas.
Mientras los manifestantes atestaban las galerías, los tres legisladores se les unieron con un megáfono para participar en los cánticos. La escena se produjo días después del tiroteo en la escuela privada cristiana Covenant. Al participar en los cánticos, los tres violaron las normas de la cámara por no haber pedido la palabra al presidente.
Los legisladores republicanos de Tennessee han sido partidarios de la idea de reforzar la seguridad en las escuelas más que del control de las armas, cuando quedan pocas semanas en el período de sesiones.
Acerca de las expulsiones, el gobernador republicano Bill Lee se ha limitado a decir que es un asunto de la cámara, pero luego pidió a la Asamblea General que apruebe leyes para impedir que personas peligrosas adquieran armas.