Personal docente de Rutgers se declara en huelga
NEW BRUNSWICK, Nueva Jersey, EE.UU. (AP) — Miles de profesores, académicos de medio tiempo y estudiantes de posgrado que laboran en la universidad emblemática de Nueva Jersey se declararon en huelga el lunes, la primera medida laboral de su tipo en los 257 años de historia de la escuela.
Las clases todavía se impartían en Rutgers cuando se organizaban paros de labores en los campus de la escuela en New Brunswick/Piscataway, Newark y Camden, si bien estudiantes señalaron que algunas fueron canceladas por la huelga. Las autoridades sindicales tomaron la decisión el domingo por la noche de ir a la huelga, citando un estancamiento en las negociaciones contractuales que mantienen desde julio. Personal de la facultad votó abrumadoramente a favor de autorizar una huelga el mes pasado.
Tres sindicatos que representan a unos 9.000 miembros del personal de Rutgers, participan en el paro laboral: Rutgers AAUP-AFT, que representa a profesores de tiempo completo, trabajadores egresados, académicos posdoctorales y algunos asesores; el Sindicato de Facultades Adjuntas de Rutgers, que representa a los profesores de tiempo parcial; y la AAUP-BHSNJ, que incluye profesores de ciencias biomédicas y de la salud de las facultades de Medicina, Odontología, Enfermería y Salud Pública de Rutgers.
Los líderes sindicales informaron que los miembros de la planta docente de las facultades de Medicina y otras ciencias de la salud continuarán realizando investigaciones esenciales y atención al paciente, pero reducirán las tareas que no afectan la salud y la seguridad de los pacientes.
Las autoridades sindicales añadieron que las negociaciones continuarán el lunes. Ambas partes planeaban reunirse en la oficina del gobernador demócrata Phil Murphy en el Capitolio estatal alrededor del mediodía.
El presidente de Rutgers, Jonathan Holloway, dijo el domingo que creía que las dos partes estaban cerca de llegar a un acuerdo. Sin embargo, los líderes sindicales aclararon que aún parecían estar lejos de un pacto.
“Decir que esto es profundamente decepcionante sería quedarse corto”, afirmó Holloway.
Los líderes sindicales exigen aumentos salariales, mayor seguridad laboral para los profesores adjuntos y financiamiento garantizado para los estudiantes de posgrado, entre otras demandas.