ONG: guardacostas libios dispararon sobre barco de rescate
EL CAIRO, Egipto (AP) — Guardacostas libios hicieron disparos de advertencia sobre un barco humanitario que intentaba rescatar a los migrantes que viajaban en un bote de goma cerca de la costa libia, según un grupo de rescate marítimo. Después los guardacostas devolvieron a suelo libio a los aproximadamente 80 migrantes que trataban de llegar a Europa.
El incidente del sábado en aguas internacionales era una nueva intercepción marítima imprudente de migrantes por parte de la guardia costera libia, que tiene instrucción y financiamiento de la Unión Europea para frenar la llegada de los migrantes a Europa, según el grupo SOS Mediterranée, cuyo barco recibió las advertencias de los guardacostas.
Un vocero de la guardia costera no respondió a una petición de comentarios.
El Ocean Viking, un barco de rescate gestionado por la organización sin fines de lucro SOS Mediterranée, respondía a una petición de auxilio para tratar de ayudar a los migrantes cuando un barco guardacostas llegó al lugar, indicó el grupo.
La patrullera se acercó “peligrosamente” al barco de rescate y amenazó a su tripulación “con armas y disparando al aire”, señaló SOS Mediterranée en un comunicado.
Un video mostraba a los guardacostas amenazando al barco y disparando un arma al aire. En las imágenes se veía al barco guardacostas moviéndose a gran velocidad antes de maniobrar, aparentemente para impedir que el Ocean Viking llegara al barco migrante. En un momento dado se oían disparos.
“No pueden dispararnos. No pueden dispararnos. Abandonamos las aguas ahora”, se oía decir a una persona en el Ocean Viking.
Entre amenazas, el barco de rescate se alejó mientras los guardacostas libios interceptaban el bote y llevaban “por la fuerza” a los migrantes de vuelta a Libia, un país sumido en la guerra, indicó la organización.
El Seabird 2, un avión de vigilancia civil propiedad de la organización no gubernamental alemana Sea-Watch, reportó haber visto migrantes que habían caído por la borda de la lancha de goma antes de ser recuperados por los guardacostas.
El incidente del sábado se sumaba a otros reportes de ONG europeas que trabajan en el Mar de Mediterráneo de amenazas o comportamiento violento por parte de guardacostas libios.
La guardia costera intentó en enero impedir que una lancha rápida de SOS Mediterranée regresara al Ocean Viking tras una operación de rescate, según el grupo. El barco logró llevar a salvo a los migrantes rescatados hasta el barco nodriza.
En octubre, Sea-Watch acusó a la guardia costera libia de amenazar con derribar su avión de vigilancia, Seabird.
Los guardacostas libios tienen instrucción y financiamiento de la Unión Europea dentro de los esfuerzos para frenar el flujo de migrantes desde el país norteafricano hacia orillas italianas.
En los últimos años, Libia se ha convertido en el principal punto de tránsito para los migrantes que buscan una vida mejor en Europa. El país petrolero se hundió en el caos tras un alzamiento apoyado por la OTAN en el que el veterano autócrata Moamar Gadafi fue derrocado y asesinado en 2011.
Los traficantes de personas se han aprovechado del caos en Libia para llevar migrantes a través de las largas fronteras de país con seis países. Después los migrantes se ven hacinados en botes de goma y otras embarcaciones mal preparadas y embarcados en peligrosas travesías marítimas.
Unos 20.000 migrantes han llegado a Italia en lo que va de año, muy por encima de los 6.000 que llegaron en los mismos meses de años anteriores, según cifras del Ministerio del Interior.
Sólo el fin de semana, unos 3.000 migrantes, muchos de los cuales habían zarpado en pequeñas embarcaciones desde la ciudad costera de Sfax, Túnez, fueron rescatados en el Mediterráneo y se dirigían a puertos italianos para desembarcar, según grupos de rescate humanitario y reportes en medios.
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La periodista de Associated Press Nicole Winfield, en Roma, contribuyó a este despacho.
