México: Cancelan cumbre por ausencia de presidente peruano
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador confirmó el martes que fue cancelada una cumbre de la Alianza del Pacífico porque el Congreso peruano no autorizó el viaje del mandatario Pedro Castillo, quien se mostró dispuesto a recibir en Lima a los integrantes del bloque.
Castillo ocupa actualmente la presidencia de la Alianza del Pacífico -una iniciativa de integración regional conformada por Chile, Colombia, México y Perú-, pero se encuentra enfrascado en disputas con el Congreso peruano por acusaciones de corrupción.
“No le permitieron al presidente de Perú asistir”, declaró López Obrador. “Es probable que podamos ir a hacer la reunión allá en diciembre”. Según la ley peruana, un presidente debe pedir permiso al Parlamento para salir del país. El Congreso peruano se lo ha negado viajar tres veces, incluida una cita con el papa Francisco y otra para asistir a la toma de mando del presidente de Colombia, Gustavo Petro.
López Obrador también confirmó que no vendrán a Ciudad de México esta semana el presidente argentino Alberto Fernández ni el mandatario electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.
López Obrador albergaba esperanzas de poder recibir a los mandatarios de esos dos países. Sin embargo, confirmó que los líderes de Chile y Colombia sí vendrán.
Castillo dijo más tarde en una actividad pública que no tenía nada oficial, pero desde ya deseaba que los países de la Alianza del Pacífico "así como AMLO estén acá. Bienvenido presidente López Obrador, ¿por qué tendría que haber algún problema? Bienvenidos a todos, todos somos hermanos”.
Luego en Twitter el presidente peruano añadió que agradecía la solidaridad y apoyo del presidente de México “al poner el interés común de nuestros pueblos por encima de cualquier irresponsabilidad política que cierto sector causó al impedir mi viaje a su tan generoso país”.
Castillo tiene cinco investigaciones preliminares de la fiscalía por presunta corrupción. Él ha negado las acusaciones en su contra y el Parlamento, de mayoría opositora, intentó destituirlo sin éxito dos veces durante su primer año de gobierno. Castillo inició su gestión el 28 de julio de 2021.
Formalmente no puede ser acusado por un juez porque la constitución peruana estipula que el presidente sólo puede ser acusado de traición, disolver al Congreso injustificadamente o no permitir que se celebren elecciones.
Castillo era maestro rural antes de asombrar a la élite política peruana al ganar las elecciones luego de una campaña en la que prometió mejorar la educación, la atención médica y otros servicios. Pero su primer año ha estado marcado por una turbulencia casi constante, con varios cambios de gabinete.