EEUU restituye licencia a equipos venezolanos sancionados

CARACAS (AP) — La Liga Venezolana de Béisbol Venezolano (LVBP) anunció el viernes que los equipos Tigres de Aragua y Navegantes del Magallanes recibieron la licencia del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, que revierte el bloqueo por casi tres años a la participación de jugadores afiliados a las mayores en esas dos novenas locales.

La LVBP tiene “el inmenso placer de anunciar al público en general, en especial a su fanaticada, que los equipos Tigres de Aragua y Navegantes del Magallanes, finalmente recibieron la licencia por parte de la Oficina de Control de Bienes Extranjeros del gobierno de Estados Unidos”, OFAC, por sus siglas en inglés.

“La medida administrativa permite a ambas divisas restablecer su ordenamiento jurídico ante Major League Baseball y su reinserción al Acuerdo de Ligas de Invierno, para así utilizar a todo el personal que milita en el beisbol organizado, algo que no habían podido hacer desde 2019”, agregó la LVBP en un comunicado, citando a su presidente, Giuseppe Palmisano.

No quedó claro cuándo expiran las licencias ni si estás podrían ser revocadas o modificadas en cualquier momento, tal y como fue establecido en diciembre de 2019, cuando el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, autorizó la participación de jugadores y técnicos afiliados a las mayores en seis de los ocho equipos —Caribes de Anzoátegui, Leones de Caracas, Tiburones de la Guaira, Bravos de Margarita, Cardenales de Lara y Águilas de Zulia— después de considerar que estás novenas no tenían ningún vínculo con el gobierno venezolano.

En agosto de 2019, la LVBP fue suspendida inicialmente cuando la administración del ahora expresidente Donald Trump, que intentaba ejercer presión para que el presidente Nicolás Maduro se separase del cargo, amplió las sanciones contra Venezuela.

La autorización anterior excluyó a Tigres y Navegantes, los dos equipos restantes de la LVBP, por considerar que mantenían vínculos con el gobierno del presidente Nicolás Maduro. Ambos equipos tienen la figura legal de fundaciones adscritas a las gobernaciones de los estados Carabobo y Aragua, que por años han estado en manos de aliados de Maduro.

Las sanciones estadounidenses, que incluyen el congelamiento de los activos del gobierno de Venezuela en Estados Unidos, prohíben a los estadounidenses y empresas foráneas relacionadas hacer negocios con el gobierno venezolano, sus familiares o aquellos que mantengan vínculos comerciales con empresas o funcionarios del gobierno.

La temporada 2022-2023, que arranca el 22 de octubre, se jugará bajo el formato de todos contra todos, adoptado durante la pandemia. En la postemporada para definir a los dos finalistas jugarán cinco equipos también bajo el formato de la eliminatoria, mientras que por condiciones del torneo quedó establecido que la figura del comodín se determinará mediante una serie de un máximo de dos compromisos entre los clubes que ocupen el quinto y el sexto lugar.

Si el conjunto que terminó en la quinta plaza gana el primer juego, entonces habrá asegurado su pase a la siguiente ronda. El sexto tendría que imponerse en los dos cotejos para ganarse su boleto a la clasificación.

La Serie Final se disputará, como es habitual, a un máximo de siete partidos.

La presencia en los rosters de jugadores de reemplazo en los Tigres y los Navegantes, entre otros equipos, procedentes de ligas independientes, no pareció minar el entusiasmo de los aficionados de este país sudamericano, donde el béisbol y no el fútbol es el deporte más popular.