Adanowsky vive su resurrección
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Adanowsky vive su resurrección con un concierto y música nueva, incluido su sencillo “Todo es perfecto” lanzado el jueves.
El músico franco-mexicano Adán Jodorowsky ha tenido varios seudónimos y personajes artísticos a lo largo de su carrera, El Ídolo, Amador, Ada, son algunos, pero de todos el que más lo identifica es Adanowsky.
“Dejé de llamarme Adanowsky durante mucho tiempo”, dijo. “Estuve muy apagado durante muchos años. Durante cuatro años yo estuve produciendo a gente, tuve mucho éxito como productor”.
Entre los músicos a los que ha producido destacan Bandalos Chinos, Daniela Spalla, León Larregui, Natalia Lafourcade, Mon Laferte, Caloncho y David Aguilar.
“Pero yo me sentía de alguna manera morir, aunque me daba mucho gusto que los otros tuvieran éxito, yo me sentía apagarme, me estaba apagando poco a poco”, dijo.
El fin de semana pasado se presentó ante un lleno total en el Auditorio Blackberry de la Ciudad de México, donde la gente lo aclamaba. Para el músico el concierto era único, pues en sus palabras era la “resurrección de Adanowsky”.
“Ahora Adanowsky está explorando las personalidades de Adán Jodorowsky. Adán Jodorowsky es el personaje ahora”, señaló.
No fue sencillo lograr la presentación. Además de los retos habituales que conlleva un concierto, Adanowsky había preparado un número de lucha libre e invitado a varios artistas, incluidos Aguilar y Spalla, así como un payaso y animadores enanos.
Pero lo que nunca imaginó es que su hermano escritor y actor Cristóbal fallecería pocos días antes. Algunos llegaron a dudar si cancelaría el concierto. Sin embargo, Adanowsky logró hacer un conmovedor homenaje y también dar tiempo para el disfrute durante en el recital al que asistió su medio hermano actor Brontis y sus sobrinos Dante y Damián.
“No fue nada fácil”, apuntó Adanowsky. “No me salió la voz... estaba a punto de llorar, eso fue muy difícil, después me costó mucho regresar a una canción más alegre, pero en un momento dado sí me concentré y creo que logré recuperarme para el final y terminar el show como tenía que terminar”.
En el concierto, Adanowsky le dedicó a su hermano la canción “Déjame llorar” que Cristóbal interpreta en la película “Santa Sangre” (1989) del patriarca de los Jodorowsky, el director de cine, dramaturgo y tarotista Alejandro Jodorowsky. Adanowsky también actúa en el filme de niño.
"Fue la primera canción que aprendí con mi hermano y se la dediqué", dijo el músico. En el concierto el público también ovacionó a Cristóbal.
Su más reciente lanzamiento, “Todo es perfecto”, es una canción con un mensaje positivo. “Habla de confiar en lo que uno es”, explicó.
Al principio no pensaba que iba a ser un sencillo, pero a todo su equipo le gustó y así se decidió a lanzarla.
Adanowsky presentará una nueva canción por mes hasta enero, cuando planea estrenar su nuevo álbum.
“Estoy contento de ese disco”, apuntó sobre la producción que definió como música que él escucharía.
"Escucho mis discos de música clásica, de soundtrack (banda musical) de películas, esos sí me gusta escuchar, música instrumental, pero ya cuando escucho mi voz, mis letras, es tan íntimo que... me da pena”, explicó.
“Todo es perfecto” viene acompañada de un video en el que él aparece leyendo un libro en su sala. El libro no se ve. "Es un concepto que ahora no se van a dar cuenta por qué es un concepto, pero cuando salga el disco sí, hay pistas”.
Los lanzamientos de su álbum, que incluirá canciones en inglés y español, comenzaron el mes pasado con “You Want To Give Up”, cuyo video fue filmado en París con un iPhone y es protagonizado por su sobrina Iris y el exnovio de ella.
Adanoswky nació en esa ciudad. Su madre, la actriz Valérie Trumblay -también conocida como Valérie Jodorowsky- nació en México de padres alemanes e ingleses, mientras que Alejandro Jodorowsky es chileno de familia ucraniana. Adanowsky está de momento muy feliz viviendo nuevamente en México.
“Es que México es increíble, es uno de los mejores países dónde vivir”, señaló. “Intenté vivir en Nueva York, en Los Ángeles, en Buenos Aires, en París, en Madrid... aquí está tranquilo, nos dejan en paz, la temperatura es ideal, se come increíble, la gente es amable, dicen que sí a todo”.
Otra de las cosas que le gustan a Adanowsky, que como su padre hace lecturas de tarot y sesiones con psicomagia, es la espiritualidad mexicana.
“Es totalmente normal en un taxi hablar de espiritualidad, o de magia y fantasmas”, dijo. “Haces eso en París y te toman por un loco, porque son todos cartesianos”.