Calor y viento avivan incendios en oeste de EEUU
SAN DIEGO (AP) — Los incendios forestales en California y Montana aumentaron de tamaño de la noche a la mañana en medio de condiciones de calor y viento y avanzaban rápidamente hacia vecindarios, obligando a las autoridades a emitir el sábado órdenes de evacuación para más de 100 viviendas, mientras las llamas en Idaho siguen propagándose.
En el Bosque Nacional Klamath en California, el incendio McKinney que comenzó el viernes y avanzaba rápidamente, pasó de destruir apenas poco más de kilómetro y medio cuadrado (una milla cuadrada) a 160 kilómetros cuadrados (62 millas cuadradas) el sábado en una zona principalmente rural cerca de la frontera con el estado de Oregon, según funcionarios de bomberos.
“Continúa creciendo debido a los vientos y tormentas eléctricas irregulares en la zona y tenemos temperaturas de tres dígitos (Fahrenheit)”, dijo Caroline Quintanilla, portavoz del Bosque Nacional Klamath.
En Montana, el incendio Elmo duplicó su tamaño a más de 28 kilómetros cuadrados (11 millas cuadradas) cerca de la localidad de Elmo.
Aproximadamente 320 kilómetros (200 millas) al sur, habitantes de Idaho continuaban bajo órdenes de evacuación después que el incendio Moose en el Bosque Nacional Salmon-Challis destruyó más de 174,8 kilómetros cuadrados (67,5 millas cuadradas) de bosque maderero cerca de la localidad de Salmon. El fuego estaba contenido en 17%.
Las altas temperaturas, el excesivo viento y los bajos niveles de humedad, a la par de una gran acumulación de maleza en la región, avivaban el incendio McKinney, dijo Tom Stokesberry, portavoz del Servicio Forestal federal para la región.
“Es un incendio muy peligroso, la geografía es escarpada y accidentada y esta zona particular no ardía desde hace tiempo”, agregó.
Un pequeño incendio también está activo en las cercanías, en las afueras de la localidad de Seiad, dijo Stokesberry. Debido a los pronósticos de relámpagos para los próximos días, personal de todas partes de California fue traído para que contribuya a combatir los incendios en la región, agregó.
Debido al veloz crecimiento del McKinney, las cuadrillas se vieron obligadas a cambiar de su intento para controlar el perímetro del fuego a fin de proteger viviendas e infraestructura crítica como depósitos de agua y tendidos eléctricos, y a ayudar en las evacuaciones en el condado Siskiyou, en el extremo norte de California.