Yulimar Rojas disipa dudas: A la final con un solo intento
EUGENE, Oregon, EE.UU. (AP) — Un solo intento bastó para que Yulimar Rojas demostrara que se encuentra bien. La venezolana se colocó de inmediato en la final del salto triple en el Mundial de Atletismo con una ejecución que requirió en realidad de cinco brincos.
Los tres primeros estaban en el libreto. Un cuarto fue necesario para que Rojas evitara tropezar con el cable de un micrófono que estaba colocado junto a la fosa de arena. Con el quinto, la mayor estrella del atletismo latinoamericano logró plantar bien los pies en el tartán y de paso adquirió una pose retadora, mientras sonreía.
“Hice eso en vez de mi baile”, relató tras su prueba sabatina.
Sí, llega al Mundial siendo ella misma.
Había dudas sobre ello, luego que la saltadora se ausentó el mes pasado de la justa de Madrid, última competición en la que participaría antes de la cita en Eugene, Oregon, debido a una contractura del psoas ilíaco de la pierna izquierda.
Esa ausencia y el silencio que le siguió durante las semanas posteriores, habían generado algunas dudas sobre el estado real de Rojas. En los días recientes, la incertidumbre aminoró, cuando la plusmarquista mundial publicó videos en las redes sociales, donde aparecía sonriente y confiada.
“No tengo ningún problema. Estoy tranquila y no siento ninguna preocupación”, comentó a The Associated Press en la zona mixta. “Los años nos han enseñado a cuidarnos para hacer mejor las cosas. Todo va de maravilla, estamos centrados en la final y en disfrutar de este Mundial tan bonito”.
En la eliminatoria, Rojas dejó claro que está disfrutando, desde el momento en que compareció en el carril de los saltos en el Hayward Field de Eugene, con el cabello corto y teñido de rubio. Alzó y agitó los brazos para arengar al público.
Como suele hacerlo, hizo varios amagos de dar un paso al frente, sólo para colocar de nuevo el pie atrás.
Luego tomó carrera y saltó 14,72 metros, que le bastaron para ganar el Grupo B de la eliminatoria y asegurar la presencia en la final del lunes. En ese mismo grupo, la dominicana Ana Timá fue segunda con 14,52, seguida por a estadounidense Tori Franklin y la jamaiquina Kimberly Williams.
Desde el Grupo A avanzaron la ucraniana Maryna Bekh-Romanchuk, como primera con 14,54 metros, seguida por la finlandesa Kristina Makela, las jamaiquinas Shanieka Ricketts y Ackelia Smith, la dominica Thea Lafond, la estadounidense Keturah Orji, la portuguesa Patricia Mamona y la cubana Leyanis Pérez.
Rojas busca en Eugene un tricampeonato en campeonatos mundiales. Desea también emular la magia que desplegó el año pasado en los Juegos Olímpicos de Tokio, donde ganó el oro al triturar por 17 centímetros el récord mundial para dejarlo en 15,67 metros.
El 20 de marzo, Rojas saltó 15.74 metros para romper su propio récord en Belgrado y conseguir su tercer título consecutivo en un mundial bajo techo.
Ella misma ha considerado posible romper la barrera de los 16 metros. El sábado insistió en ello.
“Yo tengo siempre toda la confianza y también Iván (Pedroso, su entrenador cubano)”, dijo. “Tenemos una estrategia y estas cosas no las planeas tanto, pero yo sigo diciendo que se puede”.