Prevén críticas a plan de California sobre combustibles
SACRAMENTO, California, EE.UU. (AP) — Es probable que los reguladores del aire de California escuchen un aluvión de críticas el jueves sobre un plan para reducir drásticamente el uso de combustibles fósiles y alcanzar la neutralidad de carbono para 2045, una propuesta que requeriría un cambio radical en la forma en que el estado impulsa su enorme economía frente al cambio climático.
Será la primera discusión pública en este año de la Junta de Recursos del Aire de California sobre el anteproyecto, el cual se actualiza cada cinco años y establece una hoja de ruta para que el estado alcance sus objetivos climáticos. La meta para 2045 se encuentra entre las más ambiciosas del país, pero la propuesta tiene muchas críticas más allá de la industria petrolera. Incluso defensores del medio ambiente dicen que el plan hace muy poco para reducir rápidamente las emisiones contaminantes.
California a menudo se promociona como líder en la política climática estadounidense y ha establecido algunas de las reglas más agresivas para regular las emisiones de los vehículos. Su objetivo de neutralidad de carbono para 2045 es igualado a nivel nacional solo por Hawai, y sigue los objetivos establecidos por otras economías importantes como Alemania.
Alcanzar la neutralidad de carbono significa que el estado debería eliminar la misma de cantidad de carbono del aire como el que emite. Eso sucedería mediante una combinación de reducción del uso de combustibles fósiles y el uso de tecnología para eliminar las emisiones restantes del aire. La junta estima que esto podría reducir un 91% la demanda de petróleo en toda la economía y el uso de gas natural fósil en edificios para 2045.
Hacerlo requeriría 30 veces más vehículos eléctricos en la carretera en comparación con la actualidad, seis veces más electrodomésticos en los hogares, cuatro veces más generación eólica y solar y 60 veces más hidrógeno.
Los grupos ambientalistas consideran que el plan de California no exige recortes de emisiones lo suficientemente profundos, se basa demasiado en tecnología de eliminación de carbono no probada y de uso intensivo de energía y no se enfoca en si el estado está listo para alcanzar sus objetivos de emisiones más urgentes para 2030.