Justicia chilena eleva condena a exmilitares por ejecuciones
SANTIAGO (AP) — La Corte Suprema de Chile recalificó los crímenes de 11 exmilitares y un expolicía que los días posteriores al golpe militar de 1973 asesinaron a 38 trabajadores de la localidad rural de Paine, elevando las condenas dictadas por un tribunal inferior en un dictamen inapelable, se informó el miércoles.
Las víctimas fueron detenidas en distintos asentamientos de la localidad a 40 kilómetros al sur de la capital chilena por una compañía de fusileros de la vecina Escuela de Infantería de San Bernardo, que los ejecutó en un par de quebradas cercanas, según la investigación judicial.
El tribunal recalificó los delitos de secuestro a secuestro calificado y dos de los cabecillas de los crímenes, un capitán y un subteniente del ejército, fueron condenados a 20 años de cárcel, elevándose sus penas en 5 y 10 años respectivamente.
“El máximo tribunal de la República ha dictado sentencia definitiva sobre una masacre ocurrida hace 49 años en esa localidad rural. Se ha logrado vencer la impunidad, la indolencia y la barbaridad”, señaló Nelson Caucoto, abogado de 37 de las 38 víctimas.
El fallo del máximo tribunal señala que la calificación de la muerte de los campesinos como un crimen de lesa humanidad “obliga a considerar la normativa del Derecho Internacional de los Derechos Humanos, que excluye la aplicación de la prescripción”.
El dictamen de la Segunda Sala de la Corte Suprema, firmado la víspera por los tres jueces integrantes, recordó que la normativa internacional en asuntos de derechos humanos rechaza “la impunidad y la imposición de penas no proporcionadas a la gravedad intrínseca de los delitos, fundadas en el transcurso del tiempo”.
Años después de las ejecuciones, familiares encontraron pequeños restos óseos, pero sólo de algunos campesinos porque todos fueron removidos de su tumba originales en 1978 en cumplimiento de una orden de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) que buscaba borrar las huellas de sus crímenes.
La dictadura de Pinochet dejó más de 3.000 asesinados, de los cuales más de un millar siguen en calidad de desaparecidos, y más de 40.000 fueron presos políticos.
Paine tiene un memorial que exhibe un bosque de 70 postes en homenaje a igual número de detenidos y desaparecidos en manos del cruento régimen de Pinochet.