Perú: tregua de 30 días para reinicio de mina china de cobre
LIMA (AP) — Seis comunidades quechuas de los Andes de Perú y una de las minas más grandes del mundo acordaron el jueves una tregua de 30 días para reiniciar la extracción de cobre que se envía a China y estaba suspendida desde hace 50 días.
El acuerdo se produjo tras conversaciones de representantes de la mina Las Bambas —controlada por la estatal china Minmetals mediante su filial MMG Limited— con los representantes de seis comunidades en conflicto con la minera, así como con varios ministros del gobierno del presidente Pedro Castillo.
"La empresa se compromete a partir de mañana (viernes) a reactivar todos los negocios y las economías de los microempresarios y tambien la actividad minera”, dijo el ministro de Justicia Félix Chero a la televisión pública desde un campo deportivo donde se realizó la reunión en una comunidad llamada Pumamarca.
Poco después se leyeron en voz alta los acuerdos de un acta que firmaron todos los participantes.
El gobierno se comprometió a suspender la restricción de varios derechos constitucionales que permitían a la policía detener sin orden judicial o prohibían las reuniones desde finales de abril. Las restricciones se produjeron luego que cientos de comuneros ingresaron a terrenos de la minera aduciendo el incumplimiento de diversos compromisos. La policía no ha podido desalojar al momento a una de las seis comunidades, llamada Huancuire, pero ésta se retirará tras el acuerdo. Los pasados choques entre comuneros y la policía dejaron varios heridos.
La minera Las Bambas también se comprometió, durante la tregua, a no iniciar sus actividades en un segundo tajo rico en cobre llamado Chalcobamba con una vida útil de ocho años.
Perú acumula 209 conflictos en todo su territorio, de los cuales el 63% son de origen socioambiental ligados a actividades extractivas incluida la minería, según la Defensoría del Pueblo. El conflicto en Las Bambas se fue acumulando a lo largo de los años sin que los últimos gobiernos lo hayan resuelto.
El gobierno del presidente Pedro Castillo, que inició su gestión hace 10 meses, ha cambiado cuatro veces de primer ministro y cinco veces de titular del Ministerio de Energía y Minas. La escasa continuidad de ministros en el cargo y la debilidad política del mandatario, que enfrenta incluso una investigación fiscal por presunta organización criminal, no ha permitido que los funcionarios logren acuerdos para apaciguar los conflictos entre las comunidades y las mineras.
La minería es clave para los ingresos fiscales de Perú y constituye aproximadamente el 60% de las exportaciones en un momento en que el precio del cobre sigue elevado en medio de una inflación mundial y el conflicto ruso en Ucrania.