Encuesta AP: Brecha entre obispos católicos y fieles en EEUU
La mayoría de los fieles católicos en Estados Unidos no comparten las posiciones intransigentes de muchos de sus obispos conservadores, de acuerdo con una nueva encuesta de The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research. Dicen que el aborto debería ser legal, apoyan la inclusión de los LGBT y se oponen a denegar la comunión a los políticos que apoyan el derecho de aborto.
La encuesta realizada a mediados de mayo revela una brecha clara en las posiciones predominantes entre los católicos estadounidenses y ciertas medidas de gran repercusión tomadas recientemente por los jerarcas de la Iglesia.
Por ejemplo, las autoridades de la Conferencia Estadounidense de Obispos Católicos exhortaron a los católicos de todo el país a que recen para que la Corte Suprema ponga fin al derecho constitucional al aborto, anulando su fallo Roe v. Wade de 1973. Según la nueva encuesta, el 63% de los adultos católicos dicen que el aborto debe ser legal en todos o la mayoría de los casos y el 68% pide dejar a la Roe tal como está.
El 20 de mayo, el arzobispo de San Francisco, Salvatore Cordileone, anunció que no permitirá que la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, reciba la comunión porque apoya el derecho de aborto.
Según la encuesta, únicamente el 31% de los fieles católicos coinciden en denegar la comunión a los políticos que apoyan el derecho de aborto, mientras el 66% dice que deben tener acceso al sacramento.
El 77% dice que los católicos que se identifican como LGBT deben poder recibir la comunión. En contraste, la diócesis de Marquette, que abarca la Península Superior de Michigan, dijo que los curas deben negar la comunión a católicos transgénero, gay y no binarios “a menos que la persona se haya arrepentido”.
Natalia Imperatori-Lee, profesora de Estudios Religiosos en el Manhattan College, dijo que la brecha entre la base católica y los obispos “revela un corte de la comunicación y la confianza: los pastores están muy lejos de su grey”.
“Esta es una época precaria para la Iglesia católica estadounidense”, añadió en un email. “En general, los católicos estadounidenses están habituados a vivir y trabajar en una sociedad pluralista y esta encuesta refuerza la idea de que quieren que la plaza pública siga siendo pluralista, libre de coerción y orientada al cuidado de las poblaciones vulnerables entre nosotros”.
En cambio, el padre Frank Pavone, director nacional de la organización Priests for Life (Sacerdotes por la Vida), dijo que el resultado de la encuesta, lejos de sorprenderlo, pone de relieve la necesidad de que curas y activistas contra el aborto redoblen esfuerzos para que la gente cambie de posición.
“Para los que trabajamos en asuntos por la vida, esta clase de encuestas son como un llamado”, afirmó. “Hay que trabajar y tal vez hacerlo mejor”. En cuanto a los obispos conservadores, “su conciencia de la brecha revelada por las encuestas es precisamente una de las razones que los llevan a elevar la voz”, agregó Pavone. “Se esfuerzan por cumplir el papel que les indican las Escrituras, de enseñar la fe con paciencia y persistencia, sea conveniente o inconveniente, para aclarar la confusión”.
Más allá de la brecha entre obispos y fieles, la encuesta puso de relieve otros retos que enfrenta la Iglesia católica, la más grande de Estados Unidos.
Por ejemplo, el 68% dijo que asiste a oficios religiosos una vez por mes o menos. El 37% dijo que asiste con menor frecuencia que hace cinco años y el 14% con mayor frecuencia.
En ese mismo lapso de cinco años, el 26% dijo que su opinión de la Iglesia era peor que antes y el 17% que era mejor. La mayoría dijo que su opinión no había cambiado.
Más de dos tercios de los católicos discrepan de la prohibición de la ordenación sacerdotal de mujeres y el 65% apoya la ordenación de hombres abiertamente homosexuales.
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La encuesta AP-NORC de 1.172 adultos, incluidos 358 católicos, fue realizada del 12 al 16 de mayo con una muestra del panel probabilístico AmeriSpeak de NORC, diseñado para ser representativo de la población estadounidense. El margen de error para todos los encuestados es de más/menos 4 puntos porcentuales y para los católicos de más/menos 7,4 puntos porcentuales.