Triunfos de “CODA” dan felicidad a la comunidad sorda
Cuando “CODA” (“CODA: Señales del corazón”) ganó el Oscar a mejor película en Los Angeles, astros como Samuel L. Jackson y Nicole Kidman agitaron sus manos en vez de aplaudir haciendo la seña de “aplausos” en reconocimiento a la comunidad sorda. En su casa en un suburbio de Nueva York, Laurie Ann Barish lloró, sobrepasada por lo que dijo era una sensación de aceptación por mucho tiempo esperada.
Al igual que el acrónimo que da título a la película, CODA (child of deaf adult o hijo de padres sordos), Barish fue criada por una madre sorda, de ahora 85 años. Dijo que vio su propia vida reflejada en la historia sobre una familia de Massachusetts “que quiere ser escuchada” y vista como igual a todos.
“El mundo sordo finalmente ya no está mudo”, dijo Barish, una asistente personal de 61 años quien vive en Long Beach, Nueva York. “Desearía que esto hubiera ocurrido cuando era más joven, por mi mamá. Fue un regalo maravilloso. Era para que el mundo viera que todos somos iguales, nosotros somos todos iguales”.
“CODA” es una historia tierna sobre el paso a la edad adulta de la única integrante oyente de una familia de sordos. Se convirtió en favorita del público y recibió muchos elogios de la crítica antes de ser el primer filme con un elenco principalmente sordo en ganar el Premio de la Academia a mejor película. Tres de sus protagonistas son actores sordos y ofrece un retrato auténtico de la vida sorda. Para muchos en esa comunidad, el triunfo en los Oscar dio una sensación sin precedentes de afirmación, al tiempo que ilustró el progreso reciente de Hollywood.
“CODA” fue la primera película que “permitió a la gente sorda ser normal, personas trabajadoras que se esfuerzan por criar una familia y navegar en el mundo”, dijo William Millios, quien es sordo y trabaja de forma independiente en el sector de video y desarrollo web en Montpelier, Vermont.
“Mostró sus frustraciones bastante reales, sin convertirlos en objetos de lástima que necesitan ser salvados”, agregó Millios de 56 años.
La película ganó otros dos Oscar. Troy Kotsur ganó el premio a mejor actor de reparto, convirtiéndose en el primer actor varón sordo en ganar un Oscar y el segundo actor en general en hacerlo, sumándose a su compañera de reparto de “CODA” Marlee Matlin quien había ganado el Oscar en 1987. La película también se llevó el premio a mejor guion adaptado.
Howard A. Rosenblum, director general de la Asociación Nacional de Sordos dijo que los Oscar muestran que “la excelencia está en tomar a una persona diferente para expresar convincente y poderosamente una historia en vez de actuar como discapacitado”.
“Por demasiado tiempo la industria ha reconocido a actores y directores que han explotado el tema de fingir discapacidades empáticas para llevarse premios para ellos, sin ser personas sordas o personas con discapacidades para asegurar la autenticidad”, agregó Rosenblum.
Tres de los actores de la película, incluyendo a Kotsur, están relacionados con la Universidad Gallaudet, que atiende estudiantes sordos o con problemas de audición. En el campus en Washington había una sensación palpable de júbilo el lunes, dijo Robert B. Weinstock, vocero de la universidad.
Weinstock dijo que finalmente se siente como si la gente en la comunidad sorda está siendo reconocida en la industria cinematográfica. Y espera que haya más oportunidades de empleo en las artes escénicas y en otros sectores.
“Algo que todavía no tenemos es fortaleza en los números”, dijo sobre Hollywood. “No hay tanta gente sorda involucrada en la industria en este momento. No hay tantos puestos para sordos frente o detrás de cámara .... Así que esperamos que eso cambie”.
Mientras tanto, la gente que creció en la comunidad sorda dice que la película ofrece una ventana a las complejidades de su vida, que son desconocidas para muchas personas oyentes. Por ejemplo, la película muestra lo mucho que los padres sordos pueden depender de sus hijos oyentes.
Matt Zatko, de 49 años, un abogado que vive en Pensilvania, recuerda pasar mucho tiempo cuando niño ayudando a su padre, que era sordo y trabajaba como pintor y colocador de papel tapiz.
“Recuerdo contestar el teléfono a personas que querían que hiciera trabajos y a mí hablando con ellos y en lenguaje de señas para mi papá al mismo tiempo”, dijo Zatko. “Así eran nuestras vidas, era lo que hacíamos. Pero ver que alguien hizo una película de eso ... me hizo reír. Lloré”.
La película también muestra las dificultades que enfrentan los padres sordos cuando visitan a sus hijos en la escuela, dijo Tony VonDolteren, quien es primo de Zatko y también creció con padres sordos.
VonDolteren, quien vive en St. Augustine, Florida, recordó a su papá animándolo desde las gradas en un partido de beisbol.
“Gritaba más fuerte que todos y fuera de tono”, dijo VonDolteren, de 46 años, quien es ahora el director nacional de la rama juvenil de Perfect Game, una empresa de promoción y búsqueda de talento de béisbol. “La gente decía ‘¿qué le pasa a ese tipo?’ hasta que se daban cuenta de que mi papá es sordo”.
John D’Onofrio, de 80 años, quien es sordo y vive en Boynton Beach, Florida, dijo estar encantado por el triunfo de “CODA” en los Oscar y está agradecido de que más personas conozcan cómo es la vida para las personas en la comunidad. Su hijastra es Barish, la asistente personal que vive en Nueva York.
D’Onofrio dijo que quería ser arquitecto y carpintero cuando era pequeño, pero le dijeron que no podía trabajar en eso. En cambio, laboró por 35 años como impresor en la prensa de un diario, un lugar ruidoso donde muchas personas sordas encuentran trabajo.
“Es un gran triunfo”, dijo sobre los Oscar. “Para la comunidad sorda, para la gente sorda, para todos”.