Argentina ofrece dosis alternativa a vacunados con Sputnik V
BUENOS AIRES (AP) — Argentina ofreció a vacunados con Sputnik V que quieran viajar al exterior una cuarta dosis de otra marca tras el anuncio de la Organización Mundial de la Salud de postergar la aprobación del inoculante ruso a causa de la invasión a Ucrania.
El país sudamericano fue el primero de Latinoamérica en aprobar la Sputnik V a fines de 2020 y adquirió un total de 14,6 millones de dosis en casi dos años. En el inicio de la campaña de vacunación fue el único inoculante aplicado hasta que el gobierno de Alberto Fernández cerró contratos con más laboratorios.
Estados Unidos y varios países europeos sólo admiten la entrada a viajeros inmunizados con vacunas aprobadas por la OMS, como Pfizer, Moderna, Astra Zeneca y Janssen.
“Estamos avalando la cuarta dosis en personas que necesiten viajar presentando, por supuesto, el pasaje, sea por razones personales, familiares, humanitarias, de trabajo, de estudio, religiosas o recreativas”, anunció la ministra de Salud, Carla Vizzotti, en declaraciones a radio Con Vos. “Como tenemos stock de vacunas, estamos habilitando la dosis habilitada por la OMS”.
La Organización Mundial de la Salud comunicó el miércoles que postergará su evaluación de la vacuna rusa contra el coronavirus debido a “la situación inestable”, en alusión a la invasión de Rusia a Ucrania.
Estaba prevista para el 7 de marzo la visita de una misión del organismo al Centro Nacional Gamaleya de Epidemiología y Microbiología, encargado de desarrollar la vacuna rusa. “Estas inspecciones han sido postergadas para una fecha más tarde”, declaró la doctora Mariangela Simao, experta en vacunas de la OMS. “La evaluación y las inspecciones se han visto afectadas por la situación”, añadió, explicando que la delegación ha tenido problemas para reservar vuelos y para usar tarjetas de crédito, “y otros temas operativos” en el marco de las sanciones aplicadas contra Rusia.
Opositores y expertos criticaron al gobierno de Fernández por adquirir la Sputnik V a pesar de no estar aprobada por la OMS. Si bien no se cuestionó su eficacia, uno de los aspectos más controvertidos ha sido la dificultad que han tenido muchos argentinos para viajar a países que exigen pasaporte sanitario con vacunas avaladas por el organismo internacional.
“Esto es un inconveniente que no es sanitario. Es una decisión de los países sobre una vacuna que tiene probada eficacia y seguridad. La gente no tiene la culpa”, admitió Vizzotti.
El país sudamericano ya aplica la cuarta dosis de la vacuna para mayores de 50 años vacunados con Sinopharm y mayores de 3 años inmunodeprimidos.