Johnson: crisis ucraniana, momento más peligroso para Europa

MOSCÚ (AP) — El primer ministro británico Boris Johnson dijo el jueves que la crisis en torno a Ucrania se ha convertido en “el momento más peligroso” para Europa en varias décadas, mientras su ministra del Exterior sostenía gélidas conversaciones con su homólogo ruso, quien aseguró que el Kremlin no aceptará sermones de los países occidentales.

Al mismo tiempo, fuerzas militares rusas realizaron ejercicios a gran escala al norte de Ucrania, en Bielorrusia, parte de la acumulación de 100.000 soldados que ha generado temores de una invasión.

La OTAN también ha intensificado sus despliegues militares para reforzar su flanco oriental, y Estados Unidos envió soldados a Polonia y Rumania. Un avión de la Real Fuerza Aérea Británica aterrizó el jueves en Polonia con 350 soldados a bordo, luego de que Londres enviara misiles antitanque a Ucrania para ayudar a reforzar sus defensas.

“Éste es probablemente el momento más peligroso, diría yo en los próximos días, en la crisis de seguridad más grande que ha enfrentado Europa en varias décadas, y tenemos que hacer las cosas bien”, dijo Johnson en la sede de la OTAN en Bruselas.

Johnson, quien posteriormente viajó a Varsovia para reunirse con el primer ministro polaco, dijo que cree que el presidente ruso Vladimir Putin aún no ha decidido qué hacer con Ucrania, pero añadió que Occidente debe emplear “sanciones y firmeza militar además de diplomacia”.

“Estamos al borde de un precipicio y hace mucho, mucho tiempo que no veía la situación tan peligrosa en Europa”, dijo, y añadió que depende de Putin “desentenderse y aliviar las tensiones".

En una entrevista el jueves con NBC News, el presidente de Estados Unidos Joe Bien reiteró su advertencia de que cualquier estadounidense que siga en Ucrania debería abandonar el territorio lo antes posible.

“No es que estemos tratando con una organización terrorista. Estamos tratando con uno de los mayores ejércitos del mundo. Es una situación muy diferente y las cosas podrían salirse rápidamente de control”, comentó.

Cuando se le preguntó si había algún escenario que le obligara a enviar soldados a Ucrania para rescatar a los estadounidenses, el presidente respondió: “No lo hay. Eso es una guerra mundial cuando los estadounidenses y Rusia se empiezan a disparar el uno al otro”.

En Moscú, Putin dijo que Rusia seguía manteniendo una serie de conversaciones con Estados Unidos y sus aliados y que estaba trabajando en una respuesta a las propuestas de seguridad de Occidente.

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo que envió una carta al canciller ruso Sergey Lavrov en la que reiteró una invitación a una serie de conversaciones para mejorar la seguridad europea.

Lavrov adoptó un tono severo con la secretaria británica de Exteriores, Liz Truss, quien nuevamente advirtió a Rusia que atacar a su vecino tendría “enormes consecuencias y conllevaría graves costos”.

Lavrov rechazó las preocupaciones occidentales sobre la acumulación de tropas rusas como “pura propaganda” y señaló que Moscú no tolerará sermones.

“Las posturas ideológicas, los ultimátum y las lecciones morales no llevan a ningún lado”, dijo Lavrov, señalando que su conversación con Truss era la primera reunión entre los responsables diplomáticos de los dos países en más de cuatro años. Las relaciones entre Moscú y Londres se han agriado después de que el exespía ruso SergeiSkripal fue envenenado en Inglaterra en marzo de 2018, entre otras fricciones.

Rusia ha dicho que no tiene planes de invadir Ucrania, pero quiere que los países de Occidente mantengan a Ucrania y a otras exrepúblicas soviéticas fuera de la OTAN. También quiere que la OTAN se abstenga de desplegar armas allí y retire las fuerzas de la alianza de Europa del Este. Estados Unidos y la OTAN rechazan rotundamente estas exigencias.

Truss reafirmó el llamado a Moscú para que retire a sus soldados, mientras que Lavrov rechazó la demanda por considerarla inapropiada y destacó la acumulación de recursos militares británicos y de la OTAN en Europa del Este.

Los asesores de política exterior de Alemania, Francia, Rusia y Ucrania sostuvieron el jueves negociaciones durante casi nueve horas en Berlín para intentar reactivar el acuerdo estancado, pero no lograron ningún avance.

El representante ruso, Dmitry Kozak, dijo que Ucrania se negó firmemente a comprometerse a dialogar con los rebeldes sobre un acuerdo político, lo que bloqueó cualquier avance. El enviado ucraniano, Andriy Yermak, se mostró más optimista al señalar que las partes acordaron continuar sus discusiones y alabó las conversaciones entre las cuatro partes como una “plataforma efectiva y eficiente”.

Las conversaciones celebradas en Berlín forman parte de los renovados esfuerzos diplomáticos para resolver la mayor crisis de seguridad entre Rusia y Occidente desde la Guerra Fría. El secretario de Estado de Estados Unidos Antony Blinken se ha reunido con Lavrov en Ginebra, mientras que el presidente francés Emmanuel Macron se reunió con Putin en Moscú antes de viajar a Kiev esta semana.

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Los periodistas de The Associated Press Lorne Cook en Bruselas, Robert Burns, Ellen Knickmeyer y Darlene Superville en Washington, Geir Moulson en Berlín, Yuras Karmanau en Kiev, Jill Lawless en Londres, Monika Scislowska en Varsovia, y Geir Moulson en Berlín contribuyeron a este despacho.