Ottawa declara emergencia por protestas contra restricciones
TORONTO (AP) — El alcalde de Ottawa declaró el domingo un estado de emergencia debido a las protestas contra las restricciones por el COVID-19 que han paralizado esa capital, y un exembajador de Estados Unidos en Canadá dijo que grupos estadounidenses deben dejar de interferir en asuntos internos de su vecino.
El alcalde Jim Watson manifestó que la declaratoria subraya la necesidad de que otras jurisdicciones y niveles del gobierno apoyen a la ciudad. Le otorga a ésta algunos poderes adicionales en cuanto al suministro y la prestación de servicios, lo cual puede ayudar a adquirir el equipo de protección personal que requieren los trabajadores de emergencias y los que atienden directamente a enfermos de COVID-19.
Miles de manifestantes llegaron a Ottawa nuevamente el fin de semana, uniéndose a cien que permanecían en la ciudad desde el fin de semana pasado. Los habitantes de la capital están furiosos con los incesantes sonidos de las bocinas de los vehículos, los congestionamientos vehiculares y el acoso, y temen que el tema esté lejos de resolverse después de que el jefe de policía dijo que la situación era un “asedio” que no podía manejar.
La “caravana camionera por la libertad” ha atraído el apoyo de muchos políticos republicanos estadounidenses, incluyendo al expresidente Donald Trump, quien se refirió al primer ministro canadiense Justin Trudeau como un “lunático ultraizquierdista” que ha “destruido a Canadá con requerimientos dementes contra el COVID".
“Las relaciones entre Estados Unidos y Canadá solían girar principalmente en torno a la resolución de asuntos técnicos. Desafortunadamente, hoy en día Canadá está experimentando (la influencia) de políticos estadounidenses radicales que se involucran en asuntos internos canadienses. Trump y sus seguidores son una amenaza, no sólo para Estados Unidos sino para todas las democracias”, tuiteó Bruce Heyman, embajador durante el gobierno del presidente Barack Obama.
“Bajo ninguna circunstancia, ningún grupo de Estados Unidos debe financiar actividades de perturbación en Canadá. Punto final”, añadió Heyman.
Después de que el sitio de financiamiento grupal GoFundMe dijera que reembolsaría o canalizaría a organizaciones de caridad la gran mayoría de los millones recaudados por los manifestantes que protestan en la capital canadiense, destacados políticos republicanos como el gobernador de Florida, Ron DeSantis, se quejaron.
Pero GoFundMe ya había cambiado de parecer, y señaló que reembolsaría todas las aportaciones recibidas. El sitio dijo que recortó el financiamiento a los organizadores porque había determinado que las protestas violaban los términos de servicio del portal debido a que están incurriendo en actividades ilícitas.
El primer ministro de Ontario, Doug Ford, ha dicho que se trata de una ocupación.
Por su parte, el secretario de Justicia de Texas, Ken Paxton, tuiteó: “Texanos patriotas donaron a la digna causa de los camioneros canadienses”. El senador republicano Ted Cruz declaró a Fox News: “El gobierno no tiene el derecho de obligarte a cumplir sus mandatos arbitrarios”.
“Para algunos altos políticos estadounidenses, el patriotismo significa alquilar una turba para poner bajo asedio a una capital del Grupo de los 7”, tuiteó Gerald Butts, un ex asesor de Trudeau.
En Toronto, la ciudad más grande de Canadá, la policía controló y posteriormente dispersó una protesta mucho más pequeña al instalar barricadas para impedir que los vehículos se acercaran a la legislatura provincial. Los agentes policiales también despejaron una importante intersección de la ciudad.
Muchos canadienses han expresado su indignación ante el comportamiento de los manifestantes. Algunos de ellos lanzaron pirotecnia en las inmediaciones del Monumento Nacional de Guerra el viernes por la noche. Varios portaron pancartas y banderas con esvásticas el pasado fin de semana y compararon los requerimientos de vacunación con el fascismo.
Los manifestantes han dicho que no se irán hasta que se eliminen todos los requerimientos y restricciones relacionados con el COVID-19. También exigen la salida de Trudeau del gobierno, aunque el premier es responsable de muy pocas de esas medidas, la mayoría de las cuales han sido implementadas por gobiernos provinciales.