Israel investiga la muerte de un anciano palestino detenido
JERUSALÉN (AP) — Israel investigaba el jueves después de un palestino de 80 años con ciudadanía estadounidense muriera de un ataque al corazón tras ser detenido por soldados israelíes en la ocupada Cisjordania.
El Departamento de Estado dijo que se había puesto en contacto con el gobierno israelí para pedir “aclaraciones” sobre el incidente, ocurrido el miércoles de madrugada, y señaló que respaldaba una “investigación a fondo”.
Omar Asaad fue detenido por las fuerzas israelíes cuando regresaba de la casa de un familiar en su localidad natal de Jaljulia, cerca de la ciudad cisjordana de Ramala. Fue trasladado al hospital horas más tarde, fallecido por un ataque al corazón, según el Ministerio palestino de Salud.
Los soldados detuvieron el vehículo de Asaad y le sacaron por la fuerza poco antes del amanecer, según dijo el alcalde de Jaljulia, Fouad Qattum, que citó a testigos. Las tropas se llevaron a Asaad, atado y con los ojos vendados, a un edificio abandonado cercano, dijo. Después detuvieron en el mismo edificio a varios jóvenes de la zona.
Qattum dijo que los otros detenidos no sabían que Asaad estaba allí porque estaba oscuro y el hombre no hizo ningún ruido. No le encontraron hasta más tarde, cuando se marcharon los soldados, tumbado bocaabajo y con su chaqueta colocada encima. Le prestaron primeros auxilios y llamaron una ambulancia, pero los médicos no pudieron reanimarle. No estaba claro cuándo había muerto.
“Los otros jóvenes que fueron detenidos no sabían que estaba allí. Si hubiera estado con vida habría dicho algo”, dijo Qattum.
El Ejército israelí indicó en un comunicado el miércoles que Asaad había sido detenido “tras resistirse a un control” y liberado esa noche, implicando que estaba vivo. La policía militar revisaba el suceso, añadió el Ejército.
Israel dice que investiga a fondo los incidentes en los que tropas israelíes matan a palestinos. Sin embargo, grupos de derechos afirman que esas pesquisas rara vez terminan en cargos o condenas, y que en muchos casos el Ejército no entrevista a testigos clave ni reúne pruebas.