Liberan a cerca de 100 rehenes en el noroeste de Nigeria
ABUYA, Nigeria (AP) — Cerca de 100 rehenes, en su mayoría mujeres y niños, fueron rescatados más de dos meses después de que fueron secuestrados por grupos armados en el noroeste de Nigeria, informó el martes la policía.
Entre los 97 rehenes liberados hay 19 bebés y más de una decena de niños, de acuerdo con Ayuba Elkana, jefe policial del estado de Zamfara.
En su mayoría descalzos y con ropas desgastadas, las personas liberadas fueron colocadas en autobuses para trasladarlas a Gusau, capital del estado de Zamfara. El grupo incluía a mujeres que llevaban a bebés de aspecto desnutrido.
El rescate, que se produce días después de que 21 niños fueron liberados por las fuerzas de seguridad, trajo un poco de alivio a Nigeria, donde los grupos armados han matado a miles de personas y secuestrado a un gran número de residentes y viajeros a cambio de pagos de rescate.
La policía dijo que los rehenes fueron “rescatados sin condiciones” el lunes en operativos de seguridad conjuntos que se centraron en los campamentos de los grupos armados que han estado aterrorizando a comunidades remotas del noroeste y centro del país más poblado de África.
Los rehenes habían sido secuestrados de sus viviendas y a lo largo de caminos de comunidades remotas en Zamfara y el vecino estado de Sokoto.
Los rehenes habían dormido en el suelo de reservas forestales abandonadas que sirven de escondites a estos grupos armados. El primer grupo de 68 personas “estuvo en cautiverio por más de tres meses y entre ellos hay 33 adultos varones, siete niños, tres niñas y 25 mujeres, incluidas embarazadas y madres lactantes respectivamente”, dijo el jefe policial Elkana.
Otro grupo de 29 víctimas también fue rescatado “sin condiciones” en el bosque de Kunchin Kalgo, en el área de gobierno local de Tsafe, en Zamfara, dijo la policía.
De momento se desconoce si se pagó rescate para las liberaciones, como suele ocurrir en muchas comunidades del norte de Nigeria. Las autoridades han dicho que su libertad es resultado de operativos militares, incluidos ataques aéreos.
Las grandes bandas de secuestradores están conformadas en su mayoría por jóvenes del grupo étnico de los fulanis, que tradicionalmente habían trabajado como pastores nómadas y desde hace décadas libran un conflicto con las comunidades agrícolas hausas por el acceso al agua y a las tierras de pastoreo.