Se disparan casos de coronavirus en Australia por ómicron
SYDNEY (AP) — Los casos de coronavirus se dispararon el miércoles en toda Australia a medida que se extiende el brote de la variante ómicron. El número de nuevas infecciones en Sydney y las zonas cercanas del estado de Nueva Gales del Sur aumentó a más de 11.000, frente a las 6.000 del día anterior.
El estado de Victoria también registró una cifra récord de 3.700 casos, más de 1.000 con respecto al día previo.
Más de tres cuartas partes de los australianos cuentan con esquema completo de vacunación, y aún está por verse qué tan letal resulta el brote más reciente.
Hasta ahora, Australia ha evitado los peores estragos de la pandemia y registra un total de 2.200 muertes por el virus entre sus 26 millones de habitantes.
El miércoles, Nueva Gales del Sur -el estado más poblado de Australia- informó de tres nuevas muertes por el virus y 625 hospitalizaciones, incluidos 61 pacientes en cuidados intensivos. El estado de Victoria reportó cuatro nuevos fallecimientos y 397 hospitalizaciones, 62 de ellas en cuidados intensivos.
Los centros de pruebas no han podido mantener el paso con el aumento de la demanda.
Esta semana, miles de personas en Nueva Gales del Sur han esperado durante horas para someterse a las pruebas diagnósticas. Algunos eran viajeros a los que se les exigía una prueba de PCR negativa antes de llegar a Queensland.
Sin embargo, ante la presión para flexibilizar ese requisito, el primer ministro de Queensland dijo el miércoles que aceptará las pruebas rápidas de antígenos en lugar de las de PCR para los viajeros procedentes de los puntos críticos interestatales a partir del 1 de enero.
El brote también contribuye a la escasez de donaciones de sangre, y a un llamado urgente para que los donantes se sumen.
Los requisitos de pruebas diagnósticas y de cuarentena provocados por el brote, aunados a la época de vacaciones, crearon el “peor escenario” de cancelaciones, dijo la jefa de la red de centros de donación de sangre de la Cruz Roja, Cath Stone.
“Más de la mitad de las citas no están siendo atendidas, lo que significa que necesitamos más donantes que ocupen el lugar de los que no pueden donar”, dijo Stone.