Indemnizarán a víctimas de tiroteo en escuela de Florida
FORT LAUDERDALE, Florida, EE.UU. (AP) — El distrito escolar del condado Broward, en Florida, pagará más de 26 millones de dólares a las familias de las 17 personas asesinadas y a algunas personas que resultaron heridas en la masacre a tiros perpetrada el Día de San Valentín de 2018 en la Secundaria Marjory Stoneman Douglas.
Los miembros de la junta aprobaron el martes dos arreglos judiciales para la entrega de las indemnizaciones.
Un total de 25 millones de dólares serán repartidos entre 51 demandantes, incluyendo familiares de las 17 víctimas fatales así como los alumnos y personal que resultaron heridos en la escuela de la ciudad de Parkland. Las familias también concertaron un arreglo el mes pasado con el FBI que les pagará 127 millones de dólares debido a que la inacción de la agencia por prevenir el atentado.
El distrito pagará asimismo 1,25 millones de dólares a Anthony Borges, quien sufrió algunas las heridas más graves. Su abogado se separó del caso principal con el argumento de que Borges tendrá una vida de costosa atención médica, según el South Florida Sun Sentinel.
La Corte Suprema de Florida falló en 2020 que la ley estatal limitaba a 300.000 dólares toda responsabilidad del distrito, el cual aceptó rebasar dicha cantidad. Desde el ataque a tiros, dos familiares de las víctimas fatales fueron elegidos a la junta escolar: Debbi Hixon, cuyo esposo Chris Hixon era el director deportivo, y Lori Alhadeff, la madre de Alyssa Alhadeff, de 14 años. Ninguno de ellos participó en las negociaciones ni en la votación.
“Aunque reconocemos que ninguna cantidad de dinero puede resarcir a estas familias, la junta escolar espera que este arreglo muestre nuestro sincero compromiso con las familias, estudiantes, personal y facultad de MSD así como con la comunidad del condado Broward”, dijo Marylin Batista, abogada general interina de la junta.
El grupo Stand With Parkland, que representa a las familias de las víctimas, dijo que su objetivo ha sido responsabilizar a aquellos que a su consideración podrían haber detenido al agresor , un estudiante expulsado con un largo historial de problemas mentales y emocionales. Dos estudiantes dijeron que fueron ignoradas sus advertencias a un administrador escolar de que ese exalumno podía perpetrar un ataque.
El agresor, Nikolas Cruz, de 23 años, se declaró culpable en octubre de homicidio e intento de homicidio. En su juicio, cuyo comienzo está previsto para el año entrante, se determinará si lo sentencian a muerte o a prisión perpetua sin derecho a libertad condicional.