Youngkin: Educación, clave para republicanos en el 2022

PHOENIX (AP) — El próximo gobernador de Virginia Glenn Youngkin dice que los republicanos han estado “históricamente a la defensiva” en lo que respecta a la educación, pero que su victoria en un estado demócrata indica que las cosas están cambiando y que ese puede ser un tema a explotar por su partido en las elecciones de mitad de término del año que viene.

Youngkin se alzó con la gobernación de un estado que Joe Biden ganó por 10 puntos hace tan solo un año. Lo hizo promoviendo el derecho de los padres a tomar decisiones sobre la educación de sus hijos con el slogan “los padres importan” (“parents matter”) y otros aspectos de la “guerra cultural” que hay en el país.

“Las encuestas insisten en que la educación fue el séptimo, octavo o noveno tema en orden de importancia”, declaró Youngkin el miércoles en la reunión anual de la Asociación de Gobernadores Republicanos en Phoenix, ante una audiencia de gobernadores, donantes y estrategas. “Les cuento que este es el tema principal en estos momentos y que los republicanos de todo el país pueden sacarle provecho”.

Señaló que los republicanos proponen “escuelas sólidas en las que se enseña a nuestros hijos cómo sobresalir, que no diluyan el programa de estudios, una escuela en la que los padres incidan en las decisiones acerca de lo que se les enseña a sus hijos”.

La victoria de Youngkin hizo sonar campanas de alarma entre los demócratas, que ya llevaban las de perder en unas elecciones de mitad de término que históricamente favorecen al partido opositor. También ofreció a los republicanos una fórmula a seguir en esa contienda.

Además de machacar con los derechos de los padres, Youngkin se enfocó en temas locales como los impuestos y tomó distancia de Donald Trump. Se las ingenió para cortejar el voto suburbano, que apoyó a Biden el año pasado, sin espantar a los fervorosos partidarios del expresidente Trump.

Tras la elección, declaró que la clave de su triunfo fueron los temas económicos y locales que interesan a la gente común más que los asuntos nacionales.

Esa estrategia, sin embargo, puede ser difícil de replicar en estados donde los republicanos enfrentan primarias en las que se ven empujados a asociarse con Trump o a asumir posturas que pueden perjudicarlos en las elecciones generales. Youngkin ganó la nominación republicana en un estado en el que se usó el sistema que permite seleccionar varios candidatos por orden de preferencia y con pocos votantes republicanos.

Youngkin, por otro lado, insinuó que no se debería seguir cuestionando los resultados del 2020, una estrategia que va en contra de la insistente prédica de Trump en el sentido de que perdió porque hubo un fraude electoral.

“En mi campaña miré hacia adelante, no hacia atrás”, dijo Youngkin.

El gobernador de Arizona Doug Ducey, quien coordina los esfuerzos de su partido para ganar tantas gobernaciones estatales como sea posible, dijo que la integridad de las elecciones es importante, pero “uno de numerosos temas” relevantes, no el más relevante.

Arizona, donde Biden ganó por estrecho margen, fue el epicentro de la campaña de Trump pensada para generar dudas acerca de las elecciones, en el que sus partidarios, en sintonía con los senadores republicanos, forzaron una revisión sin precedentes de las papeletas y de las máquinas usadas en el recuento de votos en el condado de Maricopa.

Esa revisión fue muy cuestionada y proyectó la figura de la secretaria de estado, la demócrata Katie Hobbs, quien asoma como la favorita para llevarse la nominación a gobernadora de su partido. Ducey no puede volver a presentarse porque ya cumplió dos mandatos seguidos.

Los republicanos también presionaron para que hubiese revisiones en Pensilvania y Wisconsin, dos estados dominados por los demócratas que los republicanos tienen en la mira.

Si bien Youngkin puso énfasis en los temas locales, otros gobernadores plantearon la necesidad de enfocarse en asuntos en los que Biden puede ser vulnerable, como la inflación, la escasez de productos por los problemas de suministro, los precios de la gasolina, la seguridad de la frontera y el caos en torno a la retirada de Afganistán.

“El contraste no puede ser más claro para los gobernadores republicanos”, expresó el gobernador de Nebraska Peter Ricketts. “Nosotros ofrecemos ese liderazgo. Rendimos cuentas por los resultados y mejoramos la vida de la gente en nuestros estados”.