Punto de quiebre lleva a Will Smith a "King Richard"
NUEVA YORK (AP) — Will Smith no parecería un candidato obvio para una crisis de la mediana edad. Tenía un éxito enorme, era inmensamente popular y era infatigablemente alegre.
Pero Smith, quien protagoniza el drama “King Richard” (“Rey Richard: Una familia ganadora”) como Richard Williams, el padre y entrenador de Venus y Serena Williams, está resurgiendo tras un extenso período de introspección. El actor de 53 años escribe en un nuevo libro de memorias que ha estado meditando, participando en ceremonias de ayahuasca y, en general, haciéndose muchas preguntas sobre su propia infancia y sus decisiones como padre, esposo y estrella de cine.
¿Qué motivó su autoindagación?
“Mi familia estaba empezando a odiarme”, dijo Smith, riendo. “Todo iba muy bien y todos se sentían miserables. Pensé, ‘tal vez debería echarle un vistazo a esto’”.
“Desde un punto de vista espiritual, comencé a llegar al límite de lo que las búsquedas materiales pueden ofrecer. Subí muchas montañas y comencé a darme cuenta de los pro y los contra del éxito material”, continuó. “Supongo que comencé a tener la esperanza de que hubiera algo más porque, si todo lo que había eran películas exitosas, me iba a meter en un lío”.
Con más de 4.000 millones de dólares recaudados en taquilla, Smith es uno de los mayores atractivos del cine y un showman por naturaleza. Pero en la vida real, ya no le interesa fingir que es sobrehumano. “King Richard”, que Warner Bros. estrena este viernes en cines y HBO Max, es parte de una nueva dirección para el actor. Su actuación es un retrato sensible y conmovedor de un padre que canaliza todo su dolor hacia el amor por su familia. Y ha dado lugar a las mejores críticas en la carrera de Smith. El actor, dos veces nominado al Oscar — por “Ali” y “The Pursuit of Happyness” (“En busca de la felicidad” — es ampliamente considerado el favorito para el Premio de la Academia.
“Hace diez años, no habría tenido la madurez y la experiencia de vida para encontrar los matices y las texturas sutiles”, dijo Smith en una entrevista reciente. “Richard Williams es un hombre difícil de querer. Pero es un hombre difícil de querer por lo mucho que él ama. Ha sido tan brutalizado e irrespetado e ignorado. Cuando chocas con ese detonante, hay un volcán de dolor allí. Su familia se convirtió en su oasis”.
“King Richard”, dirigida por Reinaldo Marcus Green, es una visión íntima de las gigantes del tenis Williams y una representación matizada de su padre-entrenador, a menudo presentado como un megalómano que se promueve a sí mismo. Es una visión autorizada de la familia Williams; Isha Price, una de las tres medias hermanas de Venus y Serena, es productora. La presenta como una familia muy unida cuyos logros, desde Compton hasta Center Court, vienen de su determinación y unión.
Aunjanue Ellis interpreta a Oracene Price, su madre. Price y Williams se divorciaron en 2002. “King Richard” podrá ser básicamente sobre Richard, pero la actuación de Ellis también ha sido destacada por la forma en que honra a la madre menos conocida pero no menos formativa de Serena y Venus.
“Ella es una de una larga lista de mujeres negras que conozco personalmente que sostienen el peso del mundo con una sonrisa, o no una sonrisa, sobre sus hombros”, dijo Ellis. “Las madres como ella, en general, no pueden compartimentar lo que hacen en la vida de sus hijos. Son entrenadoras de sus hijos, pero al mismo tiempo tienen que cocinar y limpiar, tienen que peinarse, tienen que coserles trajes de tenis. Ella era mucho para esta familia”.
Para Smith, el papel de Richard Williams tiene muchas similitudes con su propio padre. En su nueva autobiografía, “Will”, escrita con el autor de crecimiento personal Mark Manson, Smith describe a su padre con amor, pero también como un hombre militarista, alcohólico y temperamental. Recuerda que, cuando tenía 9 años, lo vio golpear a su madre en un incidente que dejó a Smith sintiéndose como “un cobarde” por no defenderla. Smith describe que una sensación de miedo lo llevó al mundo del espectáculo. Mucho más tarde, cuando su padre era mayor y estaba confinado a una silla de ruedas, recuerda haber sentido el impulso de empujarlo por unas escaleras.
Tales confesiones distan mucho de la personalidad súper alegre que Smith ha encarnado durante mucho tiempo. Como demostró en una gira de libros repleta de estrellas, con Oprah Winfrey, Ava DuVernay y otros, Smith sigue siendo un artista superlativo. Pero ahora está expresa más vulnerabilidad en un viaje terapéutico que ha presentado ante los ojos del mundo.
“A medida que me miro a mí mismo y soy vulnerable al exponerme, veo que mi capacidad para comprender a los demás y mi capacidad como actor está aumentando”, dijo Smith. “Mi viaje personal a las profundidades de las alegrías y traumas de mi pasado definitivamente me está ayudando a expandirme y construir una caja de herramientas emocionales más grande que me permitirá retratar personajes más complejos en los próximos años”.
Smith ha estado filmando este año “Emancipation” con el director Antoine Fuqua, una historia real sobre un hombre esclavizado fuertemente torturado que se emancipa de una plantación del sur estadounidense y se une al Ejército de la Unión en la década de 1860. La película, que distribuirá Apple, retiró su producción de Georgia luego que el estado aprobó leyes de votación restringida.
En Smith, Green, el director de “Monsters and Men” y “Joe Bell”, encontró a un actor “bloqueado”.
“Me encontré con un Will sobrecargado en un momento de su carrera en el que tiene algo que demostrarse a sí mismo”, dijo Green. “Está buscando a alguien que no le diga simplemente que sí. Probablemente esté rodeado de gente que se lo dice mucho”.
Eso incluyó convencer a Smith de que no usara prótesis en el rostro para parecerse más a Williams. El propio Williams nunca estuvo en el set. En cambio, los realizadores confiaron en Isha Price como contacto con la familia Williams. Serena y Venus son productoras ejecutivas de la película y asistieron a su estreno reciente en el AFI Film Fest de Los Ángeles.
La propia familia de Smith ha estado bajo los reflectores durante años. La serie de Facebook de su esposa Jada Pinkett Smith, “Red Table Talk”, ha brindado una visión extremadamente sincera de su relación y vida familiar, con sus hijos Jaden, de 23 años, Willow, de 21, y Trey, de 29, fruto del primer matrimonio de Smith con Sheree Zampino. Gran parte de sus vidas han transcurrido frente a las cámaras: Jaden actuó por primera vez con su padre en “The Pursuit of Happyness” y Willow en “I Am Legend” (“Soy leyenda”).
En un emotivo episodio de la serie de YouTube de Smith “The Best Shape in My Life”, en el que narra sus esfuerzos por ponerse en mejor forma física y mental, Smith leyó capítulos de sus memorias para sus hijos en los que comparte sus alegrías y arrepentimientos sobre cómo los crio.
“Si hay algo de lo que estoy orgulloso es de que logré que mis hijos tomaran el control y tomaran las riendas de sus vidas a una edad temprana”, dijo Smith. “No cultivé una dependencia de mí. Tal vez podría decirse que tuvieron demasiada libertad siendo demasiado jóvenes, pero a una edad muy temprana eran independientes en términos de sus pensamientos y opiniones”.
La evolución personal del actor está en curso, pero su giro hacia la franqueza puede ser permanente. En su serie de YouTube, dijo: “En este momento de mi vida, la autenticidad es mucho más poderosa para mí que el misterio”.
“Se está volviendo el enfoque central de mi vida poder usar lo que he reunido en los primeros 50 años”, dijo Smith, “y comenzar a distribuirlo en los próximos 50”.
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Jake Coyle está en Twitter como http://twitter.com/jakecoyleAP.