Activan batallón militar en joya del Caribe mexicano
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — México anunció el miércoles la activación de un batallón de más de un millar de militares en el estado sureño de Quintana Roo luego de los recientes ataques armados en la Riviera Maya, una de las joyas del Caribe mexicano, que dejaron cuatro fallecidos, entre ellos dos turistas extranjeras.
La decisión generó alivio en el empresariado turístico de Quintana Roo, que desde hace casi un año reclamaba al gobierno de Andrés Manuel López Obrador el aumento de las fuerzas de seguridad, pero analistas manifestaron dudas sobre la efectividad de la medida e indicaron que sólo representará un “teatro de seguridad más”.
A partir del 1 de diciembre comenzará a operar en la zona un batallón de 1.445 elementos de la Guardia Nacional como parte de un plan de apoyo para reforzar la seguridad que incluirá la instalación de un cuartel en la localidad de Tulum, anunció el secretario de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval. Durante la conferencia presidencial matutina, Sandoval dijo que en el plan participará también una unidad especial de 126 elementos de la Armada que ya se encuentran en la entidad y se reforzarán las labores de inteligencia.
Los 1.445 nuevos elementos se sumarán a los 5.386 militares que ya están destacados en Quintana Roo, según el gobierno.
El reforzamiento de la seguridad en Quintana Roo se da luego de los violentos eventos ocurridos el 20 de octubre en Tulum que dejaron dos turistas extranjeras fallecidas y otros tres heridos de bala. El 4 de noviembre, en una playa de la Bahía Petempich de Puerto Morelos, perecieron dos hombres tras un ataque armado en medio de decenas de turistas de unos 15 hombres presuntamente vinculados con bandas de narcomenudeo, según indicaron las autoridades. Por los eventos fueron detenidas al menos 11 personas supuestamente vinculadas con organizaciones criminales.
“Eso no se puede repetir. Tenemos que evitar que eso suceda. Por eso es el plan para reforzar la seguridad”, dijo López Obrador.
“Es una responsabilidad del gobierno federal el que salvaguarde los derechos de todos los que vivimos en este estado y lógicamente de los turistas”, afirmó el presidente de la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya, Antonio Chaves, quien dijo a la AP que el aumento del personal militar es un primer paso, pero sostuvo que ante “una zona tan amplia y un problema tan profundo creo que se van a necesitar más medios”.
La imagen de Cancún y la Riviera Maya se ha visto golpeada por los incidentes que han sido asociados a bandas vinculadas a los carteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, entre otros grupos, que se disputan el control de la venta de droga al por menor no ya en zonas marginales sino en plena playa y en los hoteles más exclusivos.
Sobre el impacto que generaron los incidentes de octubre e inicios de mes, Chaves admitió que se dieron salidas anticipadas de turistas y algunas cancelaciones, pero precisó que no fueron acciones masivas. El dirigente empresarial indicó que a raíz de esos hechos muchos hoteles reforzaron sus sistemas de seguridad e incluso aumentaron la seguridad armada. En la región de la Riviera Maya también se está avanzado en la conexión de las cámaras de seguridad de los comercios y hoteles al sistema de vigilancia de la policía.
Las políticas de seguridad desarrolladas por López Obrador durante los primeros tres años de su sexenio han sido cuestionadas por opositores y analistas que sostienen que no hay un plan definido y que sólo aplican acciones aisladas, con el apoyo de los militares, que no han contribuido a resolver el problema de la criminalidad.
“No hay mucha evidencia que a más presencia de Guardia Nacional menos homicidios”, afirmó el analista de temas de seguridad, Alejandro Hope, al descartar que la decisión del gobierno pueda resolver el problema de violencia en Quinta Roo que asoció a la actuación de la delincuencia organizada por “el cobro de piso (extorsión)”. “El turismo en Quintana Roo es una máquina de lavado de dinero, genera muchos ingresos…es un muy atractivo para las organizaciones dedicadas a extraer rentas”, agregó.
El analista dijo a la AP que para resolver el problema de violencia en la joya turística mexicana se debe fortalecer las capacidades locales y de investigación, invertir en servicios forenses, e implementar estrategias de disuasión focalizada.