Ucrania y Hungría en disputa por acuerdo de gas con Rusia
BUDAPEST (AP) — Un conflicto diplomático entre Hungría y Ucrania se profundizó el martes cuando los dos países convocaron a los embajadores del otro tras la decisión de Budapest de firmar un contrato a largo plazo para comprar gas ruso, algo que Kiev considera un golpe contra sus intereses económicos y de seguridad nacional.
El acuerdo de 15 años entre Hungría y la compañía de gas rusa Gazprom fue concluido el lunes y prevé la importación de 4.500 millones de metros cúbicos anuales de gas ruso a Hungría a través de gasoductos que evitan a Ucrania, privando al país de lucrativos ingresos por transferencia.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania emitió una declaración el lunes en la que dijo que Kiev estaba “sorprendido y decepcionado” por el acuerdo de Hungría con Rusia, diciendo que se trata de “una decisión puramente política y económicamente irrazonable en favor del Kremlin”.
La cancillería añadió que llevará el acuerdo, que entra en vigor el viernes, ante la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la Unión Europea, para que evalúe si cumple con las regulaciones del bloque.
En un mensaje en Facebook el martes, el canciller húngaro Peter Szijjarto dijo que estaba “profundamente indignado” por lo que llamó los intentos de Ucrania de bloquear el acuerdo energético y que el embajador ucraniano había sido convocado por el “intento de violar nuestra soberanía”.
“Los ucranianos no tienen nada que ver con lo que nosotros acordamos ni con quién. Nosotros consideramos una grave violación de nuestros intereses de soberanía y de seguridad nacional que ellos quieran evitar el suministro seguro de gas a nuestro país, la calefacción de los hogares de los húngaros y la operación de la industria”, escribió Szijjarto.
En respuesta, la cancillería ucraniana convocó al embajador húngaro el martes para expresarle la posición de Kiev hacia el acuerdo.
El ministro de Relaciones Exteriores Dmytro Kuleba le dijo al canal televisivo ucraniano ICTV que Hungría le había “asestado un golpe a las relaciones ucraniano-húngaras al excluir el gasoducto ucraniano del esquema de abastecimiento desde Rusia”.
“Es un golpe y nosotros responderemos como corresponda, porque no debe haber piedad ni simpatía”, dijo Kuleba.