Venezuela señala a EEUU por ciberataque contra banco
CARACAS (AP) — El gobierno del presidente Nicolás Maduro acusó el miércoles a Estados Unidos de un ataque cibernético que obligó a interrumpir por unas 130 horas los servicios del mayor banco comercial venezolano.
El ciberataque presuntamente buscaba “desestabilizar la plataforma del banco”, dijo la vicepresidenta Delcy Rodríguez en una rueda de prensa realizada en el palacio presidencial de Miraflores en Caracas.
El gobierno de Maduro, que rompió relaciones con Estados Unidos en 2019, repetidamente acusa a Washington de impulsar planes para desestabilizar su gobierno y forzar su derrocamiento. Ese país ha rechazado esos señalamientos.
“Hay pruebas que todavía no estamos presentando ante la opinión pública para no perturbar el proceso de investigación”, agregó la alta funcionaria.
La embajada de Estados Unidos en Venezuela —cuyo embajador James Story fue nombrado en noviembre pasado a pesar de que Washington no tiene diplomáticos en su embajada de Caracas— no respondió de inmediato la solicitud de comentario de The Associated Press.
Los sistemas de protección de la data del estatal Banco de Venezuela —con 14 millones de clientes en este país sudamericano de 28,7 millones de habitantes-- se activaron el 15 de septiembre, suspendiendo los servicios de banca electrónica, uso de puntos de venta, entre otras operaciones, para frenar la “saturación” de la memoria de la plataforma tecnológica del banco por la acción de los “intrusos”.
El proceso para reforzar los mecanismos de seguridad, procesamiento y almacenamiento de datos se extendió 130 horas, indicó la vicepresidenta, destacando que ya se han recuperado y registrado en 90% de las operaciones afectadas el 15 de septiembre.
Como medida de contingencia, el gobierno y la directiva del banco acordaron la apertura de las oficinas comerciales, incluso el sábado y el domingo, para facilitar la atención de clientes y recibir tramitar cualquier reclamo.
Sostenidamente en los últimos 10 años Venezuela ha experimentado varias crisis en servicios públicos y empresas estatales que las autoridades han atribuido a complots y acciones de sabotaje. Analistas y opositores sostienen que las fallas son consecuencia de la falta de mantenimiento de los equipos, poca formación del personal y presuntas irregularidades de una administración corrupta e incapaz.