Indígenas marchan en defensa de sus territorios en Bolivia
LA PAZ, Bolivia (AP) — Encabezados por un anciano que lideró la primera marcha hace 31 años, cientos de indígenas de tierras bajas de Bolivia finalizan una caminata de casi un mes en defensa de sus territorios amenazados por la deforestación, el avance agrícola, la invasión de colonos, la minera ilegal y la expansión de la coca.
Un grupo de manifestantes ingresó a Santa Cruz -la mayor ciudad del oriente- a la espera de la columna principal que desde regiones amazónicas más alejadas arribará el viernes para realizar vigilias y reclamar a las autoridades, dijo el cacique chiquitano Franklin Moreno.
Al ritmo de flautas de caña y tambores, los indígenas fueron recibidos con aplausos y bocinazos por los habitantes de Santa Cruz, el motor agroindustrial del país y centro de las disputas por tierras.
“Estamos viendo la invasión de nuestros territorios, la depredación de los recursos naturales, la contaminación del medioambiente. Esta marcha quiere decir ‘no más invasiones, no más amedrentamientos, no más avasallamiento’. Todos los bolivianos debemos parar esto y las autoridades deben trabajar en esa línea”, dijo Marcial Fabricano, de 68 años, líder de la marcha y quien encabezó la primera caminata en 1990. Una veintena de indígenas de aquella marcha han vuelto a caminar por las mismas demandas a pesar de su maltrecha salud, agregó Fabricano.
Santa Cruz es epicentro de disputas por tierras entre colonos supuestamente afines al gobierno, hacendados y comunidades indígenas en la región chiquitana, un rico bosque seco de gran biodiversidad, vecino de la Amazonia brasileña que en 2019 sufrió un devastador incendio en gran parte provocado por la expansión agrícola que acabó con más de cinco millones de hectáreas, según la Fundación Amigos de la Naturaleza.
El pasado fin de semana un productor de soja y sus labriegos fueron agredidos con disparos por supuestos ocupantes ilegales de esas tierras.
El asunto de las tierras ha elevado la tensión política. El gobierno minimizó la marcha indígena y dijo que es impulsada por la oposición política. En tanto, los opositores han respaldado a las comunidades nativas. “Las demandas han sido tergiversadas, lo cual obedece más a discursos políticos”, dijo Roberto Ríos, viceministro de la Seguridad Ciudadana. El gobierno espera un petitorio para iniciar conversaciones, acotó.
Un informe de la Oficina de las Naciones Unidas para la Droga y el Delito (UNODC) presentado a fines de agosto indicó que el cultivo de coca aumentó un 15% respecto de 2019 y buena parte de esos cultivos se han expandido en 22 áreas boscosas protegidas.
Según la organización ambientalista PROBIOMA, la expansión agrícola se da al amparo de una legislación permisiva. Diversas investigaciones también han dado cuenta de una expansión de la minería aurífera en ríos de la Amazonia. Todo ello mientras las autoridades reivindican la defensa de la Madre Tierra en los discursos oficiales, denunciaron ambientalistas.
El gobierno alienta la exportación agrícola para compensar la caída de ingresos por la venta al exterior de minerales y gas natural. Los agroindustriales dicen que el futuro del Bolivia está en la agroindustria.
“El mercado alienta la salvaje disputa de tierras y sacrifica sin pestañar los bosques”, dijo el analista y exdiputado Roger Cortez.