Funcionarios EEUU hablan de "pandemia de los no vacunados"
Funcionarios de gobierno, desde el presidente Joe Biden para abajo, han llamado la ola veraniega del coronavirus la “pandemia de los no vacunados”.
La frase pegadiza expresa con notable claridad que las personas no vacunadas contra el COVID-19 constituyen la abrumadora mayoría de los casos nuevos y las infecciones graves. Un estudio reciente de los datos del gobierno revela que las tasas de hospitalización de adultos no vacunados es 17 veces mayor que la de los vacunados.
Pero esto aparentemente no cambia la manera de pensar y sentir de los no vacunados. Y no expresa toda la verdad, dado que algunas personas vacunadas se han enfermado. Por eso las autoridades de salud recomiendan el uso de la mascarilla y las dosis de refuerzo.
“Es verdad que los no vacunados son los principales impulsores, pero no olvidemos que los vacunados también son parte de esto, debido en parte a la variante delta”, dijo el doctor Eric Topol, profesor de medicina molecular en Scripps Research en La Jolla, California. “Es evidente que la pandemia afecta todos, no solo a los no vacunados”.
Un ejemplo es el caso de Luisiana, donde las cifras estatales indican que casi el 10% de los enfermos hospitalizados están vacunados.
Llamarla la “pandemia de los no vacunados” tendría como consecuencia indeseada estigmatizar a los no vacunados”, dijo. “No debemos encapsularlos como el problema exclusivo”, agregó Topol.
Las autoridades deberían denunciar la desinformación sobre la vacuna, dijo el doctor Peter Hotez, decano de la Facultad Nacional de Medicina Tropical en la Universidad Baylor en Houston. Un chorro constante de argumentos dudosos sigue socavando la confianza del público.
“Podemos decir que el virus ha vuelto a surgir en el sur de Estados Unidos, sobre todo entre la gente no vacunada, pero eso no significa que debamos culpar a los no vacunados”, dijo Hotez. “Nuestro blanco debe ser los difusores de desinformación, y debemos reconocer que los no vacunados son víctimas de la desinformación.
Una encuesta de The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research en julio halló que el 45% de los adultos que no habían recibido la vacuna decididamente no la recibiría y el 35% probablemente no lo haría. Casi dos de cada tres (64%) adultos no vacunados dijeron que tenían escasa o nula confianza en que las inyecciones sean eficaces contra las mutaciones como la variante delta, a pesar de que los datos de salud pública revelan que la vacunación reduce drásticamente la probabilidad de enfermedad grave, hospitalización y muerte. Apenas el 3% de los adultos no vacunados dijeron que decididamente se vacunarían.