Nuevas leyes deterioran relación de Polonia con EEUU, Israel
VARSOVIA (AP) — Polonia enfrenta dificultades en sus relaciones con sus aliados Estados Unidos e Israel después que el parlamento aprobó dos proyectos de ley —uno referido a la propiedad extranjera de medios de prensa y otro que afecta los derechos de los sobrevivientes del Holocausto— a pesar de las advertencias al gobierno para que los desestimara.
La Unión Europea criticó duramente los proyectos por considerar que socavan la libertad de prensa. Las relaciones entre Varsovia y Bruselas se han vuelto tensas desde que la UE considera que Polonia, un estado miembro, está retrocediendo en materia de derechos democráticos.
Los proyectos aprobados el miércoles por la cámara baja aún requieren la aprobación del Senado y la firma del presidente, que apoya al partido de derecha que gobierna desde 2015.
Los dos proyectos amenazan con acrecentar el aislamiento de Polonia, cuya situación geográfica en Europa central frecuentemente la ha dejado a merced de vecinos más poderosos. Se considera que su membresía en la UE y la OTAN, así como su relación con Washington, son garantías cruciales de su futura seguridad.
Uno de los proyectos busca obligar a la estadounidense Discovery Inc. a vender su popular red de televisión TVN, la red privada más grande de Polonia. El otro impediría a los antiguos propietarios, incluidos sobrevivientes del Holocausto y sus descendientes, recuperar bienes expropiados por el régimen comunista.
El secretario de Estado estadounidense Antony Blinken emitió un comunicado el miércoles sobre la “problemática ley” en el cual señaló que la alianza OTAN, de la cual Polonia es miembro, “se basa en los compromisos mutuos sobre los valores democráticos y de prosperidad compartidos”.
“Estos proyectos legislativos son contrarios a los principios y valores que defienden las naciones democráticas modernas”, dijo Blinken.
El proyecto sobre los medios provocó protestas en todo el país de gente que teme por su derecho a la información independiente. Muchos de los manifestantes eran personas mayores que recuerdan la censura de la era comunista.
La aprobación del proyecto atrajo a manifestantes furiosos al edificio del Parlamento el miércoles por la noche. El legislador opositor Dobromir Sosnierz sufrió ataques verbales y empujones de manifestantes que aparentemente lo tomaron por un miembro del partido gobernante Derecho y Justicia.
El proyecto que afectaría a los antiguos propietarios —judíos o no— casi no tuvo cobertura periodística en Polonia. Pero provocó una respuesta inmediata e indignada de Israel, cuyo canciller Yair Lapid dijo que “daña la memoria del Holocausto y los derechos de sus víctimas”.