Fuerza aérea afgana ataca hospital de suroeste de Afganistán
KABUL (AP) — La fuerza aérea afgana bombardeo el sábado un hospital, con un saldo de un muerto y tres heridos, informó el propietario del complejo médico, quien agregó que el hospital fue blanco del ataque debido a que el ejército creyó erróneamente que combatientes del Talibán eran atendidos en el lugar.
El doctor Mohammad Din Narewal, dueño del Hospital Afgano de Especialidades Ariana, de 20 camas, señaló a The Associated Press que funcionarios del gobierno provincial le informaron que su hospital, en la ciudad de Lashkar Gah, fue atacado con base en la información del Ministerio de Defensa.
“Pero no había ningún talibán en el hospital”, aseveró Narewal. El Ministerio de Defensa no respondió a múltiples intentos de la AP para que algún portavoz hiciera declaraciones sobre el incidente.
“Me dijeron que hubo un error porque les dieron la información equivocada de que había talibanes dentro del hospital”, afirmó el médico, quien señaló que de hecho esos combatientes estaban siendo atendidos en otro hospital en la ciudad.
El jefe del consejo provincial, Attaullah Afghan, confirmó que la fuerza aérea atacó el hospital y que una persona perdió la vida.
El bombardeo ocurrió en momentos en que el Talibán lanza una ofensiva para controlar la ciudad suroccidental, librando intensos combates con las Fuerzas Nacionales de Seguridad y Defensa afganas. Los habitantes fueron testigos de combates en varios vecindarios en que las partes cambiaban de posiciones.
Narewal señaló que los médicos habían efectuado el día anterior dos cirugías, pero debido a la intensificación de la lucha, el hospital redujo su personal al mínimo. De momento, dos pacientes continúan en el hospital, así como varias enfermeras y auxiliares.
El sábado por la noche, las fuerzas de seguridad afganas supuestamente expulsaron a los talibanes de la ciudad y según reportes, la fuerza aérea ha lanzado fuertes ataques contra sus posiciones.
En las últimas semanas, el Talibán ha intensificado sus acciones en diversas ciudades, incluidas Herat, en el oeste de Afganistán, donde una oficina de Naciones Unidas fue atacada durante enfrentamientos en los alrededores. Un guardia fue abatido y Naciones Unidas investiga quién fue el responsable de esa muerte.