Matan a defensor de derechos humanos en el sur de México
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Un defensor de derechos humanos y catequista del estado de Chiapas, en el sur de México, fue asesinado de un disparo en la cabeza, denunciaron la Iglesia católica y varias organizaciones de derechos humanos.
El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas indicó en un comunicado que Simón Pedro Pérez López fue baleado el lunes cuando iba acompañado de su hijo a hacer compras en el mercado. “El perpetrador iba en una motocicleta en movimiento desde donde le disparó de manera directa”, agregó la nota.
Según informó la Fiscalía de Chiapas en un comunicado, el activista recibió un disparo en la cabeza y otras dos personas fueron heridas en el ataque. Los tres fueron trasladados al hospital, donde Pérez López murió.
Marcelo Pérez, sacerdote de la localidad de Simojovel -donde ocurrió el crimen-, dijo que el ataque es consecuencia de la injusticia, el narcotráfico y el crimen organizado que existen en la zona. “Simon Pedro es inocente, luchó pacíficamente... que sea semilla para despertar la conciencia de luchar por la paz” pero sin caer en la venganza, pidió.
En esa zona de los Altos de Chiapas hay una fuerte actividad de grupos armados, algunos de ellos vinculados con el crimen organizado y otros aparentemente relacionados con liderazgos políticos locales.
El homicidio tuvo lugar el mismo día en que la fiscalía del estado de Sonora, en la otra punta del país, informó que un grupo criminal fue el responsable del asesinato de otro activista, Tomás Rojo Valencia, defensor de los derechos de los yaquis.
Rojo Valencia desapareció el 27 de mayo luego de meses de tensiones debido a los bloqueos carreteros que realizaron los yaquis en protesta contra los gasoductos, acueductos y líneas ferroviarias que se construyeron a través de su territorio sin consultarlos o beneficiarlos.
Durante el fin de semana se informó también el homicidio del ambientalista David Díaz Valdez al sur de Sonora, en el estado de Nayarit, en el Pacífico mexicano. Díaz Valdez fue asesinado a tiros cuando subía a su automóvil. Había liderado la oposición a la construcción de una planta generadora de energía en su comunidad mayoritariamente indígena y había sido encarcelado recientemente, aparentemente por negarse a entregar una ambulancia utilizada por su comunidad.
Pérez López también era un indígena defensor de los derechos humanos, catequista de una parroquia e integrante de la Organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal, un grupo creado para exigir justicia tras la masacre de 45 indígenas en la iglesia de la comunidad de Acteal en 1997.
Al condenar el asesinato de Pérez López la Comisión Nacional de Derechos Humanos de México exhortó el martes a la Fiscalía de Chiapas a realizar una investigación “eficiente, pronta e imparcial” en la que se identifique y localice a los autores materiales e intelectuales del homicidio. La comisión dijo en un comunicado que durante este año han sido asesinados 12 activistas.