Grupo hispano demanda al alcalde de Santa Fe por obelisco
SANTA FE, Nuevo México, EE.UU. (AP) — Un grupo defensor de la herencia hispana de Nuevo México presentó una demanda contra el alcalde de Santa Fe por el daño causado a un monumento histórico por activistas el año pasado y la propuesta de las autoridades de la ciudad de retirarlo de manera permanente.
En la querella presentada el miércoles en la corte estatal de distrito, la Unión Protectiva de Santa Fe argumentó que el obelisco de piedra de 152 años es un sitio histórico protegido por la ley estatal y que los planes de retirarlo deshonran a los veteranos de guerra hispanos.
El año pasado, un grupo de unos 40 activistas, en su mayoría blancos, derribó el obelisco de piedra después de que otras estatuas y monumentos en Estados Unidos fueran dañados o derribados alegando que eran racistas. Los daños ocurrieron a plena luz del día después de que la policía se retiró de la zona en una medida que, según el alcalde, tenía la intención de prevenir la violencia física.
El obelisco de piedra honraba a los soldados de la Unión que murieron luchando contra las tribus indígenas y las tropas confederadas. Una inscripción que describía a la población indígena como “salvaje” fue eliminada con cincel en 1974 y nunca fue reparada.
La demanda pide a un juez que impida que las autoridades municipales gasten tiempo y dinero en hacer modificaciones al parque histórico en el centro de la ciudad hasta que el obelisco haya sido restaurado.
Eso limitaría los planes del alcalde Alan Webber de retirar definitivamente el monumento y sustituirlo por otro que las autoridades de la ciudad consideran más inclusivo desde el punto de vista cultural.
La oficina del alcalde no respondió de momento a una petición de comentarios sobre la demanda legal.
Además de ser un monumento de guerra del siglo XIX, el obelisco recuerda la concesión de tierras otorgada por la realeza colonial española a las familias hispanas que conquistaron el área en el siglo XVII.
Según los demandantes, el obelisco marca la herencia y las procesiones religiosas de los primeros hispanos de la zona y sirve como un recordatorio del genocidio cometido contra los descendientes de las tribus originales que habitaban el suelo que ahora es Estados Unidos.
“Estamos protegiendo nuestra historia, cultura y tradiciones, y también nuestra religión”, dijo Virgil Vigil, presidente de la Unión Protectiva de Santa Fe.
Para Vigil, un veterano de la guerra de Vietnam y expiloto de helicóptero, honrar a los veteranos es importante.
“Esto es respetar a nuestros soldados que dieron la vida para mantener la libertad que tenemos y acabar con la esclavitud”, dijo en una entrevista el lunes, cerca de los restos del obelisco.