EEUU: Rusia recibió datos de campaña de Trump en 2016
WASHINGTON (AP) — Fue uno de los aspectos más fascinantes —e irresueltos— de la investigación sobre las posibles conexiones entre Rusia y la campaña presidencial de Donald Trump de 2016: ¿por qué un socio comercial de Paul Manafort recibió datos estadísticos confidenciales y qué hizo con esa información?
Una declaración del Departamento del Tesoro el jueves dio una pista significativa: afirmó que Konstantin Kilimnik, un consultor político de Rusia y Ucrania, había revelado información confidencial de la campaña a servicios de inteligencia rusos.
Las autoridades estadounidenses alegan desde hace tiempo que Kilimnik tiene vínculos con la inteligencia rusa, pero la declaración en medio de un anuncio de sanciones más amplio fue acaso el vínculo más directo que haya trazado el gobierno estadounidense entre el funcionamiento íntimo de la campaña de Trump y los servicios de inteligencia del Kremlin.
La revelación fue más allá que cualquier denuncia en el informe de 2019 del fiscal especial Robert Mueller o el documento aún más comprometedor y detallado de la Comisión de Inteligencia del Senado el año pasado.
Ninguna de esas investigaciones pudo determinar qué hizo Kilimnik con los datos y si los dio a conocer a otros.
El asunto volvió a aflorar el jueves porque Kilimnik fue una de las 32 personas y organismos sancionados por el gobierno estadounidense por tratar de manipular la elección de 2020. Las autoridades dijeron que Kilimnik trató de promover la historia falsa de que fue Ucrania, no Rusia, la que tuvo injerencia en la elección de 2016.
El misterioso Kilimnik fue una figura crucial en la investigación de Mueller sobre la posible coordinación entre Rusia y la campaña de Trump en 2016.
Kilimnik fue un socio comercial de Manafort que colaboró estrechamente con él e incluso manejó la oficina de su firma en Kiev. Su nombre aparece más de 150 veces en el informe de Mueller. Fue acusado junto con Manafort de obstrucción de la justicia, pero no ha comparecido en Estados Unidos para responder a esos cargos. El FBI ha ofrecido una recompensa de 250.000 dólares por información que conduzca a su detención.
Un vocero del Departamento del Tesoro no respondió el viernes a un pedido de declaraciones.