Recrudece la violencia al suroeste de Colombia
BUCARAMANGA, Colombia (AP) — Ante una oleada de violencia, el Ministerio de Defensa colombiano anunció el miércoles nuevas medidas de seguridad en el departamento del Cauca, al suroeste del país, en donde se han registrado en los últimos días desplazamientos, un atentado terrorista y enfrentamientos entre grupos armados que se disputan el control del territorio, clave para las rentas ilícitas.
El ministro de Defensa, Diego Molano, aseguró que aumentarán la presencia de la fuerza pública en el departamento para combatir las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN), guerrilla que todavía opera en el país.
“Hace falta más cuando estas organizaciones criminales utilizan métodos de actos terroristas, de reclutamiento ilícito de los jóvenes y métodos que buscan amedrentar. Por eso la decisión es contundente: que ese esfuerzo siga en el departamento hasta que garanticemos el desarticulamiento de estas organizaciones”, dijo Molano en una comunicación oficial desde el municipio de Argelia, Cauca.
En Argelia hay 2.185 personas desplazadas, según informó el miércoles la Defensoría del Pueblo, por enfrentamientos entre disidencias de las FARC y el ELN ocurridos entre el 26 y el 27 de marzo.
“Persiste la zozobra en la población civil por la presencia de artefactos explosivos abandonados en el parque principal, algunas viviendas y en una vía de la zona urbana, lo que pone en peligro la vida de los habitantes de la zona”, indicó la Defensoría del Pueblo en un comunicado.
El Ministerio del Interior anunció el miércoles durante la visita a la zona que se brindará ayuda humanitaria, mientras que la cartera de Defensa iniciará un proceso de desminado en la zona y búsqueda de los “reclutadores de niños”.
Informes de derechos humanos sobre Colombia coinciden en que Cauca es uno de los territorios críticos del país. El Comité Internacional de la Cruz Roja advirtió en su reporte anual -publicado el 24 de marzo- que en Cauca se registraron 50 víctimas de artefactos explosivos entre los que se incluyen minas antipersonas, de las 389 reportadas en todo el país durante 2020.
En Corinto, otro municipio del norte del Cauca, también se reforzará la presencia militar tras un atentado con carro bomba el 26 de marzo que dejó 43 heridos y daños en decenas de viviendas, establecimientos de comercio y vehículos, hecho que el gobierno atribuye a una disidencia de las FARC llamada Columna Móvil Dagoberto Ramos, al mando de alias “Cejas”, por quien ofrecen una recompensa de hasta 200 millones de pesos (aproximadamente 53.000 dólares).
“Corinto llora, pero no se rinde, nuestra Fudra-4 (Fuerza de Despliegue Rápido) con esta comunicación está acá para seguir adelante, desarticular esta organización y dar con su cabecilla”, indicó el ministro Molano tras anunciar la dotación de 500 equipos de comunicación para el Ejército.
En Corinto fue secuestrado el pasado viernes y posteriormente asesinado Mario Fernando Herrera, funcionario del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía. Las autoridades han señalado como responsables del crimen a las disidencias de las FARC.
La violencia en Cauca se genera por el control del narcotráfico en la zona, tanto de marihuana como los cultivos de coca y producción de cocaína, así como de la minería ilegal.
Camilo González Posso, presidente del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), explicó a The Associated Press que las disputas de grupos armados en la zona no son nuevas y ocurren desde hace dos décadas. Sin embargo, sí tienen nuevos actores ilegales que convierten a la población en “objetivo militar” cuando se oponen a sus órdenes.
“No son grupos que están con un proyecto de ‘revolución’ o transformación política como pretendían las FARC, sino que son grupos más dedicados a negocios y a prestar servicios de seguridad a mafias y a hacer extorsión… Son muy violentos, pero no tienen mandos importantes, son jóvenes muy poco preparados sin formación política y con baja formación militar”, dijo González Posso.