Lombardía pide más vacunas para contener repunte de COVID-19
ROMA (AP) — La región italiana de Lombardía, donde estalló el primer brote del coronavirus en Europa el año pasado, le pidió al gobierno nacional el jueves más vacunas a fin de contener un repunte de casos que está agotando los recursos de la provincia de Brescia.
El súbito aumento de casos en esa provincia del norte de Italia ha estado agravando la tendencia a nivel nacional: Italia sufrió otros 19.886 casos confirmados el jueves, la cifra más alta desde principios de enero. Las autoridades reportaron otras 308 muertes por el virus, con lo que la cifra oficial de fatalidades en el país durante toda la pandemia asciende a casi 97.000.
Brescia, con 1,2 millones de habitantes, tenía poco más de 100 casos a inicios de febrero, pero el miércoles tenía 901 y el jueves 973, debido a focos de infección atribuidos a la variante británica. El número de pacientes en cuidados intensivos en el principal hospital público subió de 200 a 300 en pocos días, según fuentes médicas.
El gobernador de Lombardía, Attilio Fontana, relató que el jueves le dijo al ministro de Salud del país que la región necesita “un envío inmediato (de vacunas) en la jurisdicción donde el virus está creciendo”.
Lombardía, la provincia más poblada de Italia, ha impuesto nuevas restricciones en Brescia y ha modificado su estrategia a fin de entregar más vacunas a la provincia y a pueblos de la vecina Bérgamo. Las autoridades buscan inocular a la mayor cantidad posible de personas lo más rápido posible en las zonas más afectadas.
Guido Bertolasso, a cargo de la campaña de vacunación, expresó que la región no usará el 30% que el gobierno recomienda almacenar para una segunda dosis y que a partir del jueves comenzará a vacunar a las personas de entre 60 y 79 años mucho antes de lo anticipado. Lombardía recientemente empezó a vacunar a los mayores de 80 años, tras darle prioridad al personal médico y a residentes de albergues de ancianos.
El objetivo, explicó Bertolasso, es crear “un cordón sanitario” mediante vacunaciones masivas. La estrategia se basa en estudios hechos en Gran Bretaña e Israel según los cuales las tasas de infección disminuyen a medida que más gente recibe siquiera la primera dosis.
“Estamos en guerra”, expresó Bertolasso.