ONU reporta un descenso de las bajas civiles en Afganistán
KABUL, Afganistán (AP) — El número de civiles muertos y heridos en la violencia en la devastada Afganistán cayó un 15% el año pasado en comparación con 2019, según un reporte de Naciones Unidas publicado el martes.
La Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) y la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas atribuyeron parte del descenso a un aparente cambio de táctica de los insurgentes con más asesinatos dirigidos y menos ataques suicidas, así como a un brusco descenso en las bajas atribuidas a fuerzas armadas internacionales.
Aun así, Afganistán sigue estando entre los lugares más mortales del mundo para los civiles. Un aspecto preocupante del conflicto sigue siendo el impacto desproporcionado de la violencia contra las mujeres y niños afganos, que suponen hasta el 43% de las bajas.
Los ataques contra civiles incluyen ataques a miembros de la judicatura, los medios y los activistas. También hubo ataques contra minorías religiosas, especialmente la población musulmana chií, la mayoría perteneciente también al grupo étnico hazara, y la población sij.
El total de bajas civiles en 2020 fue de 8.820, con 3.035 muertos y 5.785 heridos, muy por debajo de los 10.000 por primera vez desde 2013. El total del año pasado fue un 15% menor al de 2019, indicó la ONU.
Los ataques con bombas, asesinatos selectivos y la violencia en el campo de batalla han aumentado en Afganistán, mientras las conversaciones en Qatar entre el Talibán y el gobierno afgano se estancaban. Ha pasado más de un mes desde que los dos bandos se reunieron.
Entre tanto, el gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, revisa el acuerdo de paz entre Estados Unido y el Talibán firmado el 29 de febrero del año pasado. Como parte del acuerdo, Washington se comprometió a que todas las tropas extranjeras se hubieran retirado de Afganistán para el 1 de mayo.
Las negociaciones de paz en Afganistán entre representantes del gobierno y el Talibán en Qatar comenzaron el 12 de septiembre, pero no han logrado reducir las víctimas civiles, un indicador clave del nivel de violencia. En lugar de eso, en el último trimestre del año hubo una escalada de la violencia.
Por primera vez desde que comenzó a documentar estos datos de forma sistemática en 2009, UNAMA reportó un aumento de las víctimas civiles entre el tercer y el cuarto trimestre del año. Además, ese periodo registró un incremento del 45% en las bajas civiles en comparación con el mismo trimestre en 2019, especialmente en lo referente a las bombas caseras y asesinatos selectivos.
El mes de 2020 con más bajas civiles fue octubre, y en noviembre se documentó la cifra más alta de bajas civiles de cualquier mes de noviembre desde que empezaron los registros sistemáticos en 2009. Además del aumento generalizado de la violencia a finales de año, la población afrontó una serie de asesinatos selectivos de personas como activistas civiles y de medios, miembros de la judicatura y del gobierno civil, así como familiares de combatientes.
“2020 podría haber sido el año de la paz en Afganistán. En su lugar, miles de civiles afganos fallecieron debido al conflicto”, dijo Deborah Lyons, representante especial del secretario general de Naciones Unidas en Afganistán. "Este importante reporte tiene el objetivo de presentar los hechos y recomendaciones a las partes responsables para que tomen medidas concretas para proteger a los civiles. Les insto a no desperdiciar un sólo día para tomar las medidas urgentes que eviten más sufrimiento".
El reporte atribuía el 62% de las bajas en 2020 a fuerzas contrarias al gobierno, en su mayoría -el 46%- al Talibán. El grupo extremista Estado Islámico fue responsable del 8% de las víctimas.
Las fuerzas a favor del gobierno causaron un cuarto de las víctimas civiles, un total de 2.231, señaló el reporte. Eso incluye 841 muertos y 1.390 heridos, un descenso del 24% respecto a 2019. La mayoría -un 22% del total- se atribuyeron a las fuerzas de seguridad afganas.
Aunque aumentó el número de bajas civiles que quedaron sin revindicar y que UNAMA no podía atribuir a ningún bando, el reporte mostraba un 19% menos de bajas civiles provocadas por el Talibán que en 2019, mientras que el grupo EI causó un 45% menos de bajas que en 2019.
Los combates por tierra fueron la principal causa de las bajas civiles en 2020. Provocaron el 36% de las víctimas civiles, un ligero aumento respecto a 2019. La siguiente eran los ataques, suicidas o no, con bombas caseras, que causaron un 34,5% de las bajas el año pasado, un 30% menos que en el año anterior.
Los asesinatos selectivos de fuerzas contrarias al gobierno causaron el 14% de las víctimas en 2020, un aumento del 45%. Los ataques aéreos a favor del gobierno causaron un 8% de las víctimas un descenso del 34%.
“En definitiva, la mejor forma de proteger a los civiles es establecer un cese el fuego humanitario”, dijo Lyons, que también dirige UNAMA. “Las partes que se niegan a considerar un cese el fuego deben reconocer las devastadoras consecuencias de esa posición sobre las vidas de los civiles afganos”.