Jóvenes españoles protestan encarcelamiento de rapero Hasél
BARCELONA, España (AP) — El encarcelamiento de un rapero por su música que elogia la violencia terrorista e insulta a la monarquía española ha desatado una explosión de rabia reprimida esta semana en el país del sur de Europa.
El arresto de Pablo Hasél llevó a miles de personas a las calles por diferentes motivos.
Bajo el lema de libertad de expresión, muchos españoles objetaron enérgicamente el encierro del artista por sus letras y tuits. Están exigiendo que el gobierno izquierdista de España cumpla con su promesa y anule la ley de Seguridad Pública aprobada por el gobierno conservador previo bajo la cual se procesa a Hasél y a otros artistas.
El encarcelamiento del martes de Hasél para que cumpla con una sentencia de nueve meses también abrió un pozo de frustración entre los jóvenes españoles, quienes sufren la mayor tasa de desempleo de la Unión Europea. Cuatro de cada 10 trabajadores elegibles menores de 25 años no tienen trabajo.
Para muchos, el caso de Hasél también representa lo que consideran una dura reacción por un estado cuya misma estructura necesita una profunda reforma.
Las canciones de Hasél contra el rey Felipe VI y a su padre, el rey emérito Juan Carlos I, han provocado un debate público sobre el futuro de la monarquía parlamentaria de España. Indiscutida fuera de la periferia de la izquierda hasta la década pasada, la casa real ha estado plagada por escándalos financieros que han alcanzado al mismo Juan Carlos. Muchos españoles se sintieron horrorizados cuando el exmonarca dejó España para irse a los Emiratos Árabes Unidos durante una investigación sobre sus presuntas faltas fiscales.
Además de exponer su apoyo a Hasél, los reunidos en Madrid corearon el sábado: “¿Dónde está el cambio? ¿Dónde está el progreso?” y “Juan Carlos de Borbón, putero y ladrón”.
El debate ha causado tensiones dentro del gobierno de coalición izquierdista del país. Mientras el presidente Pedro Sánchez y su Partido Socialista respaldan la monarquía parlamentaria que España tiene desde que terminó la dictadura de Francisco Franco en la década de 1970, su socio menor, el nuevo partido Unidas Podemos, quiere acabar con la monarquía y ha apoyado las protestas de esta semana a favor de Hasél a pesar de tornarse violentas.