Endurecen medidas en Chile por aumento de contagios
SANTIAGO (AP) — Chile endurecerá esta semana las medidas para frenar un alto incremento de contagios diarios. Cuatro de los 19 millones de chilenos quedarán confinados, mientras la mayoría verá limitada su movilidad los fines de semana y feriados, informó el lunes el Ministerio de Salud.
El ministro de Salud, Enrique Paris, explicó que la última semana los nuevos casos crecieron un 36%, por lo que a partir del próximo jueves los chilenos en cuarentena aumentarán de 1,4 millones a 3,9 millones. A diferencia de confinamientos en el pasado, se dijo que ahora el confinamiento se extendería por un máximo de un mes, cuando se reevaluará la situación.
Las 346 comunas chilenas están clasificadas en una de cuatro fases que imponen diversas restricciones sanitarias. Ninguna está en la etapa cinco, de apertura total.
La subsecretaria de Salud, Paula Daza, detalló que los confinados podrán obtener dos permisos semanales, de dos horas de duración, para interrumpir la cuarentena, mientras la mayoría de los chilenos que viven en etapa de transición --es decir, que pueden moverse libremente de lunes a viernes y vuelven a cuarentena los fines de semana y feriados-- sólo podrán solicitar un permiso. El país está bajo toque de queda de las diez de la noche a las cinco de la mañana.
Chile tuvo sus peores días de pandemia a mediados de junio y luego vivió una lenta disminución de casos por cinco meses, aunque no bajó de los 1.300 contagiados diarios. En diciembre las infecciones han ido mostrando una persistente alza que los últimos días ha promediado 4.000 nuevos casos diarios.
El subsecretario de Redes Asistenciales, Alberto Dougnac, agregó que el gobierno tiene previsto aumentar sus camas con ventilador debido a la creciente demanda. El lunes se informó que el país tiene 180 ventiladores disponibles, de un total de 2.100 reportados hace una semana. De éstos cerca del 60% son ocupados por enfermos no COVID-19.
A pesar de múltiples críticas que ha recibido el permiso especial del gobierno para que los chilenos tomen vacaciones entre enero y fines de marzo y al temor de los alcaldes de balnearios costeros o lacustres de quedarse sin camas críticas disponibles ante el aumento de veraneantes, la autoridad no dio pie atrás.
Chile registra 645.000 contagiados y 17.160 fallecidos.