Coach Jason Garrett se rehúsa a hablar de su futuro
Frente a la posibilidad de no avanzar a la postemporada y en el partido contra los Cowboys de Dallas, el coordinador ofensivo de los Giants de Nueva York, Jason Garrett, se abstuvo de conversar sobre su futuro.
Garrett, que fue coach de los Cowboys durante una década, no respondió el jueves a las preguntas de si no tiene la cosquilla de ser entrenador principal o como va con los Giants debido a los problemas de su ofensiva esta campaña.
Nueva York (5-10) es penúltimo a la ofensiva y en puntos anotados (257) antes del partido del domingo contra Dallas (6-9).
Ha sido una temporada extraña. Nueva York perdió a su astro running back Saquon Barkley quien sufrió una fuerte lesión en una rodilla al cabo de dos encuentros y el equipo tiene que jugar con una línea ofensiva que presenta a dos novatos como titulares en el flanco izquierdo y un jugador que cubrirá el centro por primera vez en su carrera en la NFL.
Como sea, el título de la División Este de la Conferencia Nacional continúa en el aire. Washington (6-9) puede conquistar la división si derrota a Filadelfia el domingo en la noche. Si pierde, el ganador entre los Cowboys y los Giants será el campeón.
No es la primera vez que Dallas y Nueva York se miden en un partido importante y Garrett enfrente a su exequipo. Garret, de 54 años, estuvo marginado en fecha reciente después de dar positivo al COVID-19.
“Sin duda, es interesante”, señaló Garret antes de la práctica. “Estas son las circunstancias, pero nos emociona esta oportunidad de jugar y conquistar el domingo el título de la división. Ha sido un año curioso en la NFL, en la División Este de la Conferencia Nacional, todo eso. Tenemos que persistir y aprovechar nuestras oportunidades, y en serio tenemos una buena el domingo”.
Garret ha tenido sin duda unas semanas interesantes. Dio positivo después de la derrota del equipo ante los Cardinales el 13 de diciembre y estuvo marginado en el encuentro contra Cleveland de la semana siguiente. El ex coach de los Browns, Freddie Kitchens, decidió las jugadas esa semana.
Garret, que estuvo aislado en una habitación de hotel durante 10 días, no tuvo muchos síntomas, salvo sentirse aletargado. Preparó el plan ofensivo y le dio seguimiento a distancia con el equipo. No se le permitió asistir a las prácticas.
“Este ha sido un año atípico para todos dentro y fuera del fútbol”, declaró Garrett, quien regresó la semana pasada con el equipo en Baltimore.
“Por supuesto que en la campaña de fútbol, hemos tenido que hacer cosas diferentes esta temporada en comparación con las anteriores”.
En una retrospectiva sobre la temporada, Garret dijo que la ofensiva ha mejorado en diversas áreas. El equipo cuida mejor el balón y redujo los castigos.